Cuando una persona se para en la puerta de la casa del Turco Naim y Emilia Attias lo que menos espera es justamente encontrarse con un hogar. Un cartel con la leyenda de “Bar Open” da la bienvenida a un espacio que, sin dudas, tiene un estilo muy marcado en cada uno de sus lugares. Es que por momentos, al recorrer los ambientes comunes, el invitado se siente en medio de un bar irlandés en pleno barrio porteño de Belgrano.
Se trata de una propiedad antigua con numerosas escaleras y varias plantas en donde los espacios para disfrutar junto a amigos son los grandes protagonistas.
Es que en el living, toda la atención se la lleva una barra que simula a la de una cervecería: hay cientos de botellas, una colección de distintos tipos de copas y vasos de cristal y lámparas con luces calidad con tulipas en forma de campana.
Allí también hay un sillón marrón oscuro de estilo chesterfiel y dos sillones de un cuerpo en color verde manzana invitan al descanso y la mesa del comedor, con capacidad para seis personas, cuenta son sillas clásicas en color cedro oscuro.
Una terraza ideal para fiestas
Por una angosta escalera se accede al espacio exterior en donde también hay un estilo que se mantiene: tres grandes murales ocupan las paredes y le ponen onda a las distintas zonas. Uno de ellos es un tigre que esta ubicado en el quincho, al lado de la parrilla.
Ya en el espacio descubierto, los pisos de madera estilo deck ponen calidez. Hay una mesa de vidrio con base de mimbre y sillas de hierro. También hay otras modelo acapulco en cercanía al la segunda vedette de la casa… el bar de la terraza.
La construcción tiene techo de chapa, una luz roja y macetas en esa misma tonalidad. Detrás hay un mural en la pared y otro más chico cerca.
