A la hora de armar un look, los detalles hacen la diferencia. Y uno de los más importantes —aunque muchas veces pase desapercibido— es la combinación entre el tipo de escote de la prenda y los accesorios que lo acompañan. Un collar mal elegido puede romper la armonía de un outfit. En cambio, uno bien pensado tiene el poder de realzar, estilizar e incluso equilibrar visualmente la silueta.
Por eso, armamos esta guía práctica para que sepas qué tipo de cadenas, gargantillas o colgantes usar según el escote que elijas. Y de yapa, también te contamos qué aros van mejor con cada uno.
Escote en V: el aliado de los collares largos
El escote en V, profundo o más discreto, es uno de los más favorecedores y versátiles. Para acompañarlo, los collares en forma de Y, cadenas finas con dijes colgantes o collares largos que sigan la línea del escote son la opción ideal. El efecto visual alarga el cuello y estiliza el torso.

¿Y los aros? Si el collar es protagonista, elegí aros pequeños o medianos, como argollas finas o studs. Si no querés usar collar, podés sumar aros largos que acompañen la forma del escote.

Escote redondo: collares cortos o gargantillas
Para prendas con escote redondo, lo mejor es elegir collares que se ubiquen por encima de la línea del escote. Las gargantillas, chokers o cadenas cortas con dijes llamativos funcionan perfecto. Si el escote es cerrado, un collar XL o chunky puede darle un toque trendy.

¿Y los aros? Todo vale, pero si usás collares llamativos, lo ideal es equilibrar con aros más sobrios.

Escote strapless: equilibrio visual
El strapless deja los hombros al descubierto y necesita un accesorio que llene ese espacio sin competir. Las gargantillas al cuello o collares pegados al hueso de la clavícular son perfectos. También podés optar por un layering: un mix de collares finos en diferentes alturas.

¿Y los aros? Esta es tu oportunidad para lucir aros statement: largos, con brillo o de formas originales.
Escote halter: foco en los aros
El escote halter, que rodea el cuello y deja al descubierto los hombros, no necesita collar. Lo ideal es dejar el cuello libre y concentrar la atención en los aros. Pueden ser colgantes, con formas geométricas originales o con piedras de color, para completar el look y darle un toque llamativo pero equilibrado.

Escote cuadrado o recto: simetría ante todo
Los escotes rectos, como el cuadrado o el bandeau, permiten jugar con collares más estructurados. Los collares cortos, con formas definidas o líneas rectas, armonizan con la estructura del escote.

¿Y los aros? Podés sumar aros que repitan esa lógica de formas rectas o geométricas.
Un último tip
Más allá de las reglas, lo más importante es que elijas los accesorios que te representen. El estilo personal siempre va primero, y esta guía está pensada para ayudarte a potenciarlo, no a limitarlo.
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