La Reina Isabel hizo una reciente aparición pública que desterró los rumores de que estaba atravesando problemas de salud. La primera mandataria del Reino Unido fue fotografiada sonriente y relajada cuando llegaba a bordo de un automóvil al Royal Windsor Horse Show, cerca del Castillo de Windsor, donde reside desde hace más de dos años.
sabel II reaparecía por sorpresa en esta prestigiosa competición ecuestre, en la que participaban varios de sus caballos y disipó las versiones sobre un presunto delicado estado de salud, ya que no pudo pronunciar el tradicional discurso que marca cada año el inicio de una nueva sesión parlamentaria y tuviera que ser reemplazada por su hijo, el Príncipe Carlos.
Con gafas ahumadas y un blazer de punto azul oscuro, apareció sentada en el asiento delantero de un Range Rover, desde donde se la vio intercambiando algunas palabras y riéndose con un pequeño grupo de personas.
En los últimos meses sus apariciones públicas se han vuelto muy escasas, se la ha visto andando con un bastón y se quejó de que le cuesta moverse. Según la prensa británica, utiliza silla de ruedas en la intimidad.
La salud de la Reina preocupa desde que en octubre pasó una noche hospitalizada para someterse a "pruebas" cuya naturaleza nunca se precisó. También se infectó con el coronavirus en febrero, lo que según dijo ella misma la dejó "muy cansada".
Su anterior aparición pública había sido el 29 de marzo, con motivo de un misa en Londres en honor de su difunto esposo, el príncipe Felipe, que murió a los 99 años en 2021.
