Cuando se trata de cumplir metas y hacer realidad lo que nos proponemos es necesario trabajar en cada objetivo, pero también hace falta una cuota de buena suerte.
La canela es un producto ideal para aromatizar y, además, se le atribuyen poderes místicos relacionados con la abundancia, ya que es muy poderosa para atraer energías positivas. En este sentido, es conocido el ritual que consiste en esta especia en polvo de la palma de la mano, dejándolo un día sin barrer para atraer la abundancia al hogar.
Pero existe otro pensado para saldar deudas y acomodar las finanzas que también se debe realizar el primer día del mes. Incluso puede resultar útil para atraer las buenas energías, para quienes quieren cambiar de trabajo o conseguir uno nuevo.
Para realizar este ritual se necesitan:
-2 ramitas de canela.
-1 sahumerio de sándalo.
-Un pedazo de hilo rojo
El ritual de la canela para saldar deudas pendientes
1- Encender el sahumerio y pasar por el humo las ramas de canela 7 veces.
2- Luego, colocar las rama de canela en forma de cruz y atarlas con el hilo rojo haciendo 3 nudos fuertes.
3- Poner la cruz de canela detrás de la puerta de casa, de la oficina o de tu negocio, para atraer la abundancia y, de esta manera, saldar las deudas pendientes.
Cómo hacer un amuleto de canela
Hay quienes afirman que parte del poder de la canela reside en su aroma y es por eso que aconsejan hacer un amuleto para dejarlo colgado de la puerta principal de la casa.
Se realiza haciendo un atado con 9 ramitas de canela, que se deben sujetar con un hilo rojo. De esta manera, se eliminarán las malas energías, a la vez que se aromatiza el ambiente de manera natural.
Es aconsejable tener a mano sahumerios aromatizados con canela: dicen que encender uno en la habitación atraerá el amor.
Si estás buscando trabajo o tenés ganas de cambiar el tuyo, dicen que poniendo un poco de canela en polvo en tus zapatos será de gran ayuda.
Los baños con canela también atraen la buena energía: en la bañera podés sumergir una ramita en el agua. Si te bañás en la ducha, hacé el enjuague final con una jarra de agua tibia en la que hayas disuelto una cucharada de canela.
