No todas las plantas necesitan la misma dosis de sol para vivir: algunas, por el contrario, crecen bien en jardines que están en sombra. En general son espacios más cerrados, al amparo de muros altos o con frondosa vegetación. Para ellos también hay especies (incluso algunas con flor) que agradecen esta condición natural. ¡Y vaya sin son bellas!
Es una de las plantas más usadas en jardinería. Hay numerosas variedades de azaleas y muchas de ellas son híbridos que dan origen a colores y combinaciones espectaculares. Crecen como arbustos, siempre con abundante floración. Se llevan bien en interiores o exteriores, preferentemente en semisombra (no en sombras profundas, ya que sus flores necesitan luz para crecer) pero sí fuera del sol directo que las marchita. Necesitan riego abundante (requieren mucha humedad) y suelos con buen drenaje.
Esta especie tropical, cuyas hojas crecen en forma de roseta (están curvadas hacia adentro y se van superponiendo unas con otras formando una suerte de cavidad) posee un follaje tupido en color verde oscuro, púrpura o grisáceo, a veces con manchas o rayas blancas. Pueden florecer en cualquier época del año, con una flor muy vistosa que dura sólo unos días. Las dos condiciones que necesitan para crecer bien son humedad justa (un buen riego semanal es suficiente) y luz (no sol directo).
Es un tipo de helecho (miembro de una gran familia con más de 250 especies de helechos y originario de Asia) que se arrastra formando una corona de la cual brotan sus hojas. Son plantas que deben de estar en semisombra o sombra total pero con luz. También se llevan bien en interiores: son ideales para cultivar en la entrada de las viviendas o en patios interiores, siempre lejos de corrientes de aire.
Esta planta vivaz, de 10 a 30 cm de alto, tiene hojas lanceoladas y terminadas en punta, con flores blancas pequeñas y muy perfumadas. Crece muy bien en macizos sombríos y húmedos.
La gran familia de los helechos tienen en común que no dan flores y crecen bien en semisombra o sombra (no total, porque necesitan luz para crecer). Aguantan bastante bien el frío (son ideales para plantar junto a la entrada a la casa o en patios interiores) y necesitan una humedad alta. El riego debe ser abudante, hasta 2 veces al día.
Estos preciosos arbustos suman color y estructura en cualquier lugar, con unas flores espectaculares en blanco, rosa o tonos azulados. Prefieren la sombra y la semisombra, ya que el sol directo quema sus hojas y seca sus bellas flores. A las hortensias les encanta el agua de lluvia y su riego debe ser diario.
La hosta es una planta perenne semi rastrera, que puede crecer sólo entre 5 y 10 cm y que es muy apreciada por sus hojas. Muy indicada para cultivar en sombra o semi-sombra y en ambientes preferentemente húmedos. Presenta flores con forma tubular o de trompeta, que pueden ser en color blanco, lavanda, azul o pírupura, pero es una planta que se destaca principalmente por su follaje.
Es una hierba perenne que alcanza de 1 a 1,5 m de altura, con hojas simples y amplias, de entre 60 a 80 cm de largo, con nervaduras marcadas. El pasto palmera tiene unas pequeñas flores amarillas agrupadas en inflorescencias erguidas, de gran porte, y abundantes durante casi todo el año. Es ideal para sitios de semi sombra, en canteros y borduras o en macetas. Es de crecimiento rápido y tiene otra gran ventaja: atrae mariposas.
Conocida como planta del dinero, las Plectranthus son unas plantas muy bonitas, que se utilizan tanto en interiores como en jardines en sombra o semi sombra. Sus hojas suelen ser redondeadas, verdes, aun que hay algunas que las tienen variegadas. Suelen ser plantas aromáticas y pelosas, por lo que sin duda son muy interesantes tanto para jardín como para su cultivo en maceta. Conviene resguardarla del sol directo (crece bien en rincones en sombra que sean lumininsos) y lejos de corrientes de aire.
Agradecemos a la paisajista Clara Marré por sus recomendaciones.