La reinaLetizia volvió a elegir el traje como su mejor aliado para los actos institucionales. Esta vez, en compañía de la princesa Leonor y la infanta Sofía demostraron, las tres apostaron por distintos conjuntos sastre —gris, rojo y azul marino—, reafirmando que el traje femenino no entiende de edad ni de jerarquías.
Más que una tendencia, el traje es una declaración. Nacido en el siglo XIX como uniforme de elegancia práctica, fue Coco Chanel quien lo liberó de las estructuras rígidas y Yves Saint Laurent quien lo transformó en un emblema de poder femenino con su icónico Le Smoking. Desde entonces, representa libertad, autoridad y sofisticación.
Tres generaciones, tres maneras de llevarlo
El traje sastre demuestra una vez más su versatilidad: cambia con los accesorios, los tejidos y el color. Puede ser formal o relajado, clásico o moderno, y sobre todo, es una herramienta para expresar identidad sin renunciar a la elegancia.
Lo que une a las tres es más que el parentesco: es la idea de que el traje sastre se convirtió en el nuevo básico del guardarropas femenino. Versátil y sofisticado, se adapta a cada generación y personalidad. Letizia, Leonor y Sofía lo confirman: el poder también se viste de traje.
Madre e hijas lo confirman: el poder femenino también se viste de traje.
Letizia: el poder del gris clásico
La reina Letizia volvió a confiar en su silueta favorita: el traje sastre de chaqueta cruzada con pantalón recto. Eligió un diseño en tono gris acero, de líneas puras y sobrias, que combinó con un top negro y stilettos al tono.
El resultado: un look impecable, de autoridad contenida y sofisticación moderna. Es su versión más diplomática del power suit, ideal para eventos institucionales.
Leonor: minimalismo juvenil en azul marino
La princesa de Asturias apostó por un traje azul profundo, sin camisa ni accesorios, dejando que el corte limpio y el color hablen por sí solos. Su elección transmite confianza y madurez, pero con un aire fresco que conecta con su edad.
El azul marino, tono asociado al equilibrio y la serenidad, refuerza su papel institucional sin perder naturalidad.
Sofía: el rojo como símbolo de energía y personalidad
La infanta Sofía eligió un traje rojo intenso, cruzado y con botones dorados, que aportó juventud y carisma al conjunto familiar. El contraste con su melena suelta y su actitud relajada hizo que su look fuera el más vibrante del trío.
Una elección audaz, pero elegante, que demuestra que el traje también puede ser sinónimo de alegría y empoderamiento.
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