Lejos de las cámaras y del mundo mediático en el que creció, Iara Weich, la única hija mujer de Julián Weich, y Valeria Wainer, encontró su vocación en el universo de la moda sustentable.
A los 32 años, lidera junto a su amiga Julieta Alalu el proyecto Bunker, un espacio que promueve la compra y venta de prendas de segunda mano. Su objetivo: revalorizar el consumo responsable y darle una nueva vida a la ropa.

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Bunker: moda circular desde Palermo hasta Barcelona
"Un proyecto arrancó en un mono ambiente en Colegiales hace casi 10 años y después de mucho esfuerzo, pasión y amor por este proyecto logramos desembarcar en Barcelona", escribió Iara en su sredes. Hoy, Bunker tiene su primer local en el barrio porteño de Palermo, y rápidamente se convirtió en un punto de encuentro para quienes buscan ropa con estilo, historia y conciencia ambiental.
En 2025, Iara dio un paso más: inauguró una sucursal en Barcelona, ampliando el alcance de su propuesta de moda circular.

“Cuando empezamos hace casi diez, para algunos era impensado consumir ropa de segunda mano. Hoy eso cambió. Quien elige sumarse a la moda circular no lo hace solo por una cuestión económica, sino por una elección de vida”, contó Iara.
Con una cuidada curaduría, Bunker ofrece prendas de las mejores marcas a precios accesibles, y también recibe ropa de quienes desean revenderla, fomentando una economía circular que cuida el planeta y apuesta por un consumo más consciente.
Además, tiene una estética moderna, minimalista y con espíritu eco chic, Bunker se consolida como una de las propuestas más interesantes del circuito de moda circular argentina.

Desde Buenos Aires hasta Barcelona, el mensaje de Iara es claro: “Vestite para este mundo. Prendas únicas, como nuevas.”
Un proyecto con propósito
Más allá de lo estético, Iara sostiene que Bunker nació con una intención clara: darle sentido al consumo y conectar con historias reales.

“Queremos que comprar ropa usada deje de ser un plan alternativo y se convierta en una elección consciente”, explica.
Por eso, impulsan la campaña Segundas Oportunidades, donde invitan a las clientas a compartir sus experiencias personales de transformación y cambio.
Una familia con valores compartidos
El compromiso con lo social y ambiental parece ser una marca registrada en la familia Weich.
Antes de emprender su propio camino, Iara trabajó en Conciencia, la marca de alimentos saludables creada por su padre, que dona el 50% de sus ganancias a fundaciones como TECHO, Fundación Huésped y Ruta 40.
Su hermano, que vive en Córdoba, también sigue una línea de vida sustentable y conectada con la naturaleza. Así, cada uno de los Weich refleja, a su manera, los valores de solidaridad y compromiso que Julián siempre transmitió.
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