A un mes del nacimiento de su hijo Arturo, Jimena Barón transita un momento pleno y desafiante. Entre pañales, noches sin dormir y el descubrimiento constante de la maternidad, la artista se tomó un respiro para conectar con su bienestar físico y emocional.
Fiel a su estilo auténtico y cercano, Jimena compartió con sus seguidores un momento especial de su día. En sus historias de Instagram, mostró cómo mientras su bebé descansaba en una cunita, ella aprovechaba para elongar, moverse y reconectar con su cuerpo. “El pibe se va quedando solito y se hace lo que se puede”, escribió divertida sobre el video donde se la ve haciendo ejercicios de estiramiento y plancha.
Sin lookearse ni posar y vestida de entrecasa, la intérprete de La Cobra dejó en claro que, más allá del ritmo agitado que impone el puerperio, se puede –aunque sea por unos instantes– priorizar el autocuidado.
En otro posteo, Jimena mostró lo que eligió para desayunar y lo hizo con una cuota de humor, como acostumbra. “Y mi desayuno de tortuga”, escribió, mostrando una bandeja con hojas verdes, zanahorias y unas tostadas integrales calentándose. Una elección sencilla, nutritiva y práctica, ideal para los tiempos que corren cuando hay un recién nacido en casa.
Pero lo que más emocionó a la cantante fue otro instante íntimo que compartió con sus seguidores: “Y me pude bañar tranquila porque Arturo se quedó feliz con su niñero”, escribió, junto a una imagen que derritió corazones. En la historia se ve a Momo, su hijo mayor, entreteniendo con ternura a su hermanito, mientras ella aprovechaba ese pequeño gran rato para relajarse.
Sin filtros ni poses, Jimena volvió a mostrarse como muchas mujeres en esta etapa: aprendiendo a equilibrar el amor por sus hijos con los momentos para una misma.
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