Tarta de verduras: receta fácil y con pocos ingredientes - Revista Para Ti
 

Tarta de verduras: receta fácil y con pocos ingredientes

Tarta de verduras: receta fácil y con pocos ingredientes
Una opción rápida, rica y con ingredientes cotidianos. En solo 30 minutos y con 5 pasos, podés tener lista esta tarta casera ideal para el almuerzo o la cena.
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Preparar una tarta de verduras es una de esas recetas que nunca fallan: simple, económica y perfecta para aprovechar lo que tengas en la heladera. Con pocos ingredientes y en apenas media hora de horno, obtenés un plato casero, dorado y delicioso que se disfruta recién salido del horno o incluso frío al día siguiente.

Ingredientes (molde de 24 cm, 4 porciones)

  • 2 tapas de tarta (hojaldradas o criollas)
  • 1 cebolla chica, picada
  • 1 zanahoria rallada
  • 1 zapallito en cubitos
  • 1 puñado de espinaca (fresca o congelada)
  • 2 cdas. de aceite de oliva
  • 3 huevos
  • 150 ml de leche
  • 3 cdas. de queso rallado
  • Sal y pimienta a gusto

Preparación paso a paso

Paso 1: salteá las verduras
En una sartén con aceite de oliva, rehogá la cebolla, la zanahoria y el zapallito durante 5–7 minutos hasta que estén tiernos. Sumá la espinaca y cociná 2 minutos más. Si largan líquido, escurrilo.

Paso 2: batí la base
En un bowl, mezclá los huevos con la leche y el queso rallado. Condimentá con sal y pimienta. La mezcla debe quedar fluida pero con cuerpo.

Paso 3: uní el relleno
Agregá las verduras ya templadas a la mezcla de huevos y probá para ajustar la sazón si hace falta.

Paso 4: armá la tarta
Enmantecá el molde y acomodá una de las tapas. Volcá el relleno y cubrí con la segunda tapa. Hacé el repulgue en los bordes y pinchá la superficie con un tenedor. Si querés, pincelá con huevo batido para un dorado extra.

Paso 5: horneá
Llevá al horno precalentado a 180 °C durante 30–35 minutos, hasta que la superficie esté bien dorada y crocante. Dejá reposar 5 minutos antes de cortar.

Tips y variaciones para potenciar la receta

  • Podés sumar otros vegetales como morrón, brócoli o calabaza, según lo que tengas a mano.
  • Si querés un sabor más intenso, agregá hierbas frescas como perejil, albahaca o un toque de orégano seco.
  • Para una versión más liviana, usá solo una tapa de masa y transformala en una tarta abierta.
  • Se conserva muy bien en la heladera: la podés recalentar o comer fría al día siguiente.

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