La empresaria compartió desde su cuenta de Instagram, que se realizó un kinesiolifting facial, una técnica nueva que ayuda disminuir arrugas.
Wanda Nara siempre marca tendencia e innova con todo lo que se hace en cuanto a tratamientos de belleza. A la empresaria le gusta verse bien y desde su cuenta de Instagram, suele revelarle a sus seguidores qué es lo que se hace. ¿Su última apuesta? el kinesiolifting facial, un método no invasivo que revolucionó TikTok durante la pandemia, y que da increíble resultados.
Se trata de una técnica manual que tiene como objetivo resolver las áreas con más arrugas, pliegues y flacidez desde adentro, porque tiene como objetivo la recuperación interna de la zona. Es indoloro y no es invasivo, por lo que resulta ser un tratamiento ideal con excelentes resultados que se ven rápidamente. Además, actúa a nivel kinesiológico, neuromecánico y energético.
El kinesiolifting facial es mucho más que un masaje, tiene como objetivo crear un proceso de reeducación natural del órgano de la piel a través del cual se verán los resultados sin necesidad de aplicar ningún producto externo ni de utilizar aparatos. Hablamos de un tratamiento que también se utiliza como drenaje linfático, lo que reduce la hinchazón, generando un efecto rejuvenecedor con el que la mayoría de las pacientes salen felices por los prontos resultados.
Al no tener contraindicaciones y ser un tratamiento natural, basado en un tipo de masajes, por recomendación de los especialistas debe durar 60 minutos. El kinesiolifting facial es una técnica muy recomendada para rejuvenecer la piel sin aplicar ningún tipo de relleno ni nada externo, que hasta sirve para corregir asimetrías y el doble mentón. Eso sí, se necesita ser constante, ya que los resultados son progresivos.
En plena pandemia, cuando no se podía salir, es que empezamos a escuchar sobre esta técnica que se conoció como "yoga facial". De hecho, hay muchos tutoriales sobre cómo hacerlo en casa y, por los cambios que se veían en las redes, empezó a sumar cada vez más adeptos. Hoy la técnica se volvió cada vez más profesional y las alternativas son miles. Solo hay que ver cuál opción va mejor con nosotras y también, podemos evaluarlo con un dermatólogo de confianza si lo recomienda.