Según el Feng Shui, cada tono vibra de una forma distinta y tiene impacto directo en nuestras emociones, descanso y bienestar. Por eso, si estás pensando en renovar tu dormitorio, elegir la paleta adecuada puede marcar la diferencia.
¿Lo mejor? No necesitás hacer una reforma total ni mover muebles. A veces, con solo pintar las paredes, ya podés sentir un cambio real en la energía del espacio (y en vos también). Acá te compartimos los 7 colores que esta filosofía milenaria recomienda.
La lista de colores para pintar las paredes de colores del cuarto, según el Feng Shui
1. Blanco roto
El blanco cálido o blanco roto es ideal si buscás paz y claridad mental. Aporta orden, pureza y amplitud, pero sin el frío del blanco puro.
En Feng Shui, se asocia con el metal, y favorece el foco, el silencio y la tranquilidad mental. Sumá detalles en madera o textiles suaves para balancear.
2. Beige o arena
Los tonos beige, arena o tiza conectan con el elemento tierra, que en Feng Shui representa estabilidad, contención y seguridad.
Son perfectos para quienes buscan un dormitorio cálido, envolvente y con energía de hogar. Además, combinan con todo.
3. Verde
El verde claro o pastel está asociado al elemento madera y representa crecimiento, salud y renovación.
Es ideal si querés un espacio que te ayude a relajarte, respirar mejor y conectar con una energía más natural. Va genial con blanco, lino y detalles en fibras.
4. Azul claro
En Feng Shui, el azul está vinculado al agua y transmite calma, introspección y serenidad. Los tonos celeste o azul humo son ideales para conciliar el sueño, bajar revoluciones y crear un clima más introspectivo. Evitá los azules muy intensos, que pueden resultar demasiado fríos o tristes.
5. Rosa viejo o empolvado
El rosa suave o empolvado activa la energía del amor, la dulzura y el autocuidado. En Feng Shui se lo asocia con la armonía de los vínculos y la suavidad emocional. Es un color perfecto si querés un cuarto con vibra romántica pero sin exagerar.
6. Gris cálido
El gris claro y cálido puede funcionar como base neutra sin perder calidez. Si bien el gris no es el color más “fengshuístico”, cuando se elige bien, puede ofrecer introspección, equilibrio y modernidad.
Eso sí, sumale texturas y detalles en otros tonos para evitar que se vea apagado.
7. Lavanda o lila suave
El lavanda aporta calma espiritual, intuición y relajación profunda. En Feng Shui, se lo relaciona con la conexión interior y el descanso mental.
Es ideal para quienes tienen insomnio, ansiedad o una mente muy activa antes de dormir.
Pintar con intención también es energía
No se trata solo de seguir una regla: el Feng Shui propone elegir colores que reflejen cómo queremos sentirnos.
Pintar las paredes del dormitorio con tonos que nos conecten con el descanso, la calma y la contención puede ser el primer paso hacia un mejor dormir… y una vida más armoniosa.
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