La propuesta arquitectónica de esta casa se basa en un juego de volúmenes puros con contrastes entre llenos y vacíos, sencillez en cuanto a materiales y respeto absoluto por los árboles preexistentes.
El proyecto fue pensado para una familia con tres hijos, y se estructuró en dos niveles, con una planta baja en forma de “L” que contempla el sector público más una tira para los cuartos y baños de los hijos, y un nivel superior reservado exclusivamente para la suite principal.
Producción: Malu Satzger. Fotos y video: Fabián Uset.