Si bien el riego es fundamental para cualquier planta, en exceso, puede perjudicarla y dañarla severamente. Acá te acercamos una guía para identificar si esto ocurrió y un paso a paso para saber cómo actuar.
Las plantas son ideales para decorar cualquier rincón de la casa. Si bien es cierto que existen especies fáciles de cuidar y mega resistentes, puede pasar que nos excedamos con los riegos y terminen "ahogándose".
Este factor es uno de los principales motivos por los que nuestras amadas plantas de interior terminan con sus raíces dañadas y, en muchos casos, se marchitan definitivamente.
Pero no todo está perdido... La buena noticia es que existen algunos tips para revivirlas y que permanezcan espléndidas durante mucho tiempo. Acá te contamos cuáles son.
Si ya descubriste que tu planta está "ahogada", es el momento perfecto para actuar y evitar que se marchite por completo. Acá te acercamos los pasos a seguir: