Hoy, 28 de mayo es el Día Mundial de la Nutrición, jornada creada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para generar conciencia sobre de la importancia de alimentarse adecuadamente para nutrir el cuerpo y tener buena salud.
Comer es uno de los máximos placeres de la vida: la comida es mucho más que nutrientes: es evocar recuerdos, vivir emociones, y también una excusa para encontrarnos con quienes más queremos para compartir buenos momentos. A través de la comida ponemos en juego costumbres, gustos, creencias e influencias.
No obstante, estamos sumergidos en una cultura bombardeada por las publicidades y casi nada de educación alimentaria fidedigna. Circulan opiniones de gente con poca o ninguna formación en salud indicando sobre qué hace bien, presentando proomesas vacías de contenido para ser fit, bajar de peso, anti-aging, para combatir el cáncer, entre otra cosas.
Entonces ¿por qué o para qué deberíamos saber qué estamos comiendo? Nos conviene saberlo, ya que es la presencia o ausencia de nutrientes la que nos brindará salud o nos enfermará a corto y a largo plazo, según la frecuencia con las que los consumamos en nuestro día a día.
Mucha gente compra alimentos “naturales” y “saludables” sin saber que distan mucho de serlo más allá de la etiqueta. Y es por eso que se recomienda comer más cosas “con cáscara” y menos “de paquete”. Sobre todo, en niños y adolescentes donde 4 de cada 10, presentan algún tipo de sobrepeso. De hecho, es más frecuente la malnutrición con sobrepeso que la malnutrición con baja talla.
¿Y para qué me sirve cada cosa? La guía de “Consejería en Hábitos Alimentarios” (MSAL 2012) resume así:
Es importante también evitar el consumo de alcohol. Mitos como “una copita de vino le hace bien al corazón”, esconden la verdad del aumento de riesgo de todo tipo de cáncer asociado al consumo frecuente de alcohol, aún en pequeñas dosis.
No dudemos en preguntarle a profesionales cuando se trata de nuestra salud, sobre todo alimentaria. Alimentarme sanamente hoy me ahorra comprar remedios mañana. Tenemos un solo cuerpo y lo mejor que nos puede ocurrir es sentirnos a gusto en él.
Por la Dra María Cecilia Carranza (MN 144324) médica nutricionista en Centro Médico Bionut (@bionut_obesidad)