Es un plato vegetariano tan rico como liviano y cuenta con una gran ventaja: se le pueden sumar todas las verduras que quieras. Una propuesta ideal para comer algo calentito y con pocas calorías.
Este es el plato ideal para preparar y disfrutar cuando bajan las temperaturas.
Paso 1: Cubrí la cebolla y el ají con rocío vegetal y rehogalos junto con el ajo en una olla precalentada.
Paso 2: Luego agregá el caldo y, cuando rompa en ebullición, incoporá el resto de los ingredientes.
Paso 3: Condimentá reservando el pimentón para agregarlo al finalizar la cocción, previamente disuelto en agua fría.
Paso 4: Serví en los platos y colocar el queso picado sobre la preparación caliente y salpicá con perejil picado.