Rocío Marengo atraviesa uno de los momentos más emocionantes y transformadores de su vida. A pocas semanas de convertirse en mamá por primera vez, la modelo vive un presente cargado de amor, aprendizaje y gratitud junto a su hijo Isidro, nacido el pasado 3 de diciembre, fruto de su relación con Eduardo Fort.
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En plena víspera de Navidad, Marengo recibió la noticia más esperada: Isidro, de apenas 21 días, recibió el alta médica y podrá pasar su primera Nochebuena en casa junto a sus padres. Una emoción inmensa que la modelo no dudó en compartir con sus seguidores.
A través de sus historias de Instagram, Rocío expresó su felicidad con un mensaje simple y lleno de ternura: “Mi amorcito, llegó el día… Hoy nos vamos a casa”. En la imagen, se lo ve al pequeño durmiendo plácidamente, envuelto en una sábana y con su chupete, una postal que conmovió a sus seguidores.
Un comienzo difícil y lleno de fortaleza
Desde los primeros días posteriores al nacimiento, Marengo fue actualizando el estado de salud de Isidro. Al haber nacido de manera prematura, el bebé debió permanecer internado en Neonatología bajo observación médica durante algunas semanas.
En ese contexto, la modelo también enfrentó duras críticas en redes sociales por mostrarse activa mientras su hijo continuaba internado. Lejos de callar, decidió contar su verdad y poner en palabras el difícil proceso que atravesó.
“Mostrás un video vestida, salís a comer con tu familia y te juzgan de mala madre, sin saber cómo estás por dentro”, escribió con sinceridad, visiblemente afectada por los comentarios.
Rocío también explicó la gravedad del cuadro que vivió durante el embarazo y el parto, revelando que tanto ella como su hijo estuvieron en riesgo. “Se me desprendió la placenta, tuve hemorragias y el parto fue de urgencia. Con Isi corrimos riesgo de vida. Fue un ‘ya al quirófano’”, relató, agradeciendo especialmente a su obstetra por su rápida intervención en ese momento crítico.
Con Isidro fuera de peligro y de regreso en casa, Marengo se muestra plena y enfocada en disfrutar esta etapa única, sin permitir que las críticas opaquen la felicidad que siente.
En esta Navidad, la familia Marengo-Fort celebrará las fiestas de una manera muy especial: con su hijo en brazos y el corazón lleno de esperanza dando inicio a una nueva etapa marcada por el amor y la resiliencia.
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