Un breve video filmado en la escalerilla de un avión en Vietnam encendió las redes y generó especulaciones en medios internacionales: Brigitte Macron parece darle una cachetada a su esposo, el presidente Emmanuel Macron. ¿Qué pasó realmente? ¿Fue un gesto violento, simbólico o simplemente malinterpretado?
El especialista en comunicación no verbal Hugo Lescano analizó el momento y aportó su mirada profesional sobre la escena que generó un verdadero revuelo en Francia y más allá.
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¿Fue una cachetada real? Qué dice el rostro de Macron
Según explicó Lescano en sus redes sociales, el comportamiento de Emmanuel Macron en ese momento revela una reacción emocional genuina. “La bofetada fue real. Lo sabemos porque la sonrisa que muestra Macron junto al saludo es antitética al enojo o la ira”, comentó el experto. En otras palabras, la expresión del presidente francés no coincide con una situación tensa o incómoda, sino que actúa como una forma de encubrirla.
Esto se relaciona, según el especialista, con un principio clave de la comunicación no verbal formulado por Charles Darwin: “Los humanos, en situaciones críticas, mostramos en el rostro y en el cuerpo emociones contrarias a las que estamos atravesando”.
Un gesto rechazado y una distancia que habla
Otro detalle llamativo en la escena es la interacción física. Macron le extiende el brazo a su esposa como gesto de cortesía para ayudarla a bajar la escalera del avión, pero Brigitte lo ignora por completo. Este acto, sutil pero evidente, indica un rechazo en el plano corporal.
Además, como señala Lescano, la distancia entre ambos al descender la escalinata —conocida como “proxemia” en el análisis del lenguaje corporal— es significativa. No hay contacto visual, físico ni sincronía en los movimientos. Todo esto refuerza la idea de un vínculo tenso en ese preciso instante.
Y hay un dato no menor: las escalerillas de embarque de los aviones tienen medidas estándar y son bastante angostas. No es fácil mantener tanta distancia caminando en paralelo: hay que esforzarse para no tocarse. El espacio entre sus cuerpos, entonces, no solo fue notorio, sino también intencional. Una señal más del malestar de Brigitte hacia Emmanuel en ese momento.
Qué nos revela el lenguaje corporal en momentos críticos
Hugo Lescano remarca que los gestos espontáneos muchas veces comunican más que las palabras. “Incluso cuando más dolía, algo dentro nuestro encontraba fuerzas para seguir”, suele decir en relación con el poder del cuerpo para expresar emociones profundas.
En este caso, la combinación de la aparente bofetada, el rechazo del brazo y la distancia corporal son señales que, juntas, muestran una escena con tensión emocional real, más allá de la sonrisa protocolar del mandatario.
Este episodio se convirtió en un claro ejemplo de cómo el cuerpo puede hablar incluso cuando se intenta disimular lo que ocurre emocionalmente. Para quienes quieran profundizar en estos temas, Lescano ofrece una Certificación Virtual en Comunicación No Verbal, con enfoque en el análisis de gestos y microexpresiones.
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