Las papas hasselback son una creación sueca que se volvió furor en todo el mundo por su textura única: crocante por fuera y cremosa por dentro. Su nombre viene del restaurante “Hasselbacken” de Estocolmo, donde se prepararon por primera vez en la década de 1950.
Hoy son una guarnición que se luce tanto en una cena especial como en un almuerzo informal. Y lo mejor es que, aunque parecen sofisticadas, son muy fáciles de hacer. En esta versión, las combinamos con manteca de hierbas y parmesano para un toque aromático y gourmet.

Mirá También

Cómo hacer papas fritas crocantes: receta rápida y el truco infalible para que parezcan de restaurante
Ingredientes para las papas hasselback:
- 6 papas medianas (preferentemente de tamaño parejo)
- 50 gramos de manteca derretida
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 dientes de ajo picados
- 1 cucharada de perejil fresco picado
- 1 cucharada de romero fresco (o tomillo, o mezcla de hierbas a gusto)
- 50 gramos de queso parmesano rallado
- Sal y pimienta negra a gusto
Preparación de las papas hasselback:
- Paso 1: Lavá bien las papas sin pelarlas.
- Paso 2: Colocá una a una sobre una tabla y, para que los cortes no lleguen al fondo, poné una cuchara de madera a cada lado.
- Paso 3: Hacé cortes finos a lo largo (de unos 2 mm entre sí). Las papas deben quedar con forma de abanico, pero unidas en la base.
- Paso 4: En un bowl, mezclá la manteca derretida con el aceite de oliva, el ajo, el perejil y el romero.
- Paso 5: Pincelá las papas con esta mezcla, asegurándote de que penetre bien en los cortes. Salpimentá a gusto.
- Paso 6: Colocá las papas en una fuente para horno. Cociná a 200 °C durante 40 a 50 minutos, pincelando a mitad de cocción con más manteca de hierbas.
- Paso 7: En los últimos 10 minutos, espolvoreá el queso parmesano y dejá gratinar hasta que estén doradas y crujientes.

Tips y variaciones para potenciar la receta
- Si querés una versión más liviana, reemplazá la mitad de la manteca por aceite de oliva.
- También podés usar manteca compuesta (con ralladura de limón y perejil) para un sabor más fresco.
- Agregales un toque de queso azul o cheddar antes del gratinado final para una versión más intensa.
- Servilas con crema agria o yogur griego: el contraste con la papa caliente es delicioso.
Suscribite al newsletter de Para Ti
Si te interesa recibir el newsletter de Para Ti cada semana en tu mail con las últimas tendencias y todo lo que te interesa, completá los siguientes datos:



