Si estás buscando una receta simple, rica y con ingredientes fáciles de conseguir, estos rollitos de zucchini rellenos de ricota y limón son una gran opción. Se preparan en pocos pasos, no requieren horno (aunque podés gratinarlos si querés) y combinan lo mejor de las verduras con un relleno cremoso y bien fresco. Son perfectos para resolver una comida liviana, una entrada elegante o incluso una picada diferente.
Además, admiten muchas variaciones, así que podés adaptarlos a lo que tengas en casa o darles un toque más gourmet sin complicarte.
Ingredientes para los rollitos de zucchini:
- 2 zucchinis grandes
- 250 gramos de ricota
- Ralladura de 1 limón
- 1 a 2 cucharadas de jugo de limón (a gusto)
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Sal y pimienta
- Hojas de albahaca o menta (opcional)
- Queso rallado fino (parmesano o reggianito, opcional)
Preparación de los rollitos de zucchini:
- Paso 1: Lavá bien los zucchinis y cortalos en láminas finas a lo largo, ayudándote con una mandolina o un cuchillo bien afilado. Para que sean flexibles y no se quiebren al enrollar, cocinalos brevemente:
- Paso 2: En una plancha o sartén con apenas aceite, 1 minuto por lado, o en agua hirviendo, entre 30 y 40 segundos.
- Paso 3: Retiralos y dejalos enfriar sobre papel absorbente.
- Paso 4: En un bowl, mezclá la ricota con la ralladura y el jugo de limón, el aceite de oliva, sal y pimienta.
- Paso 5: Integrá bien hasta lograr una textura cremosa pero firme. Si querés sumar más sabor, agregá hierbas frescas picadas o un poco de queso rallado.
- Paso 6: Colocá una cucharada del relleno sobre cada lámina de zucchini.
- Paso 7: Enrollá con cuidado y acomodá los rollitos en una fuente, uno al lado del otro.
- Paso 8: Rociá con un hilo de aceite de oliva, agregá pimienta recién molida y, si te gusta, un poco más de ralladura de limón por encima. Podés servirlos fríos, a temperatura ambiente o tibios.
Tips y variaciones para potenciar la receta
- Para una versión más gourmet, sumá nueces picadas o pistachos al relleno.
- Quedan riquísimos con un toque de miel o un chorrito de aceto reducido al momento de servir.
- Podés prepararlos con anticipación y guardarlos en la heladera hasta 24 horas.
- Si los preferís tibios, espolvoreá parmesano por encima y gratiná 5 minutos antes de servir.
- También podés acompañarlos con una ensalada fresca o sumarlos a una mesa de picada saludable.
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