Las arrugas son pliegues que se forman en la superficie de la piel a medida que envejecemos. Estas líneas son causadas principalmente por la pérdida de colágeno y elastina en la piel, así como por la exposición al sol, el tabaquismo y otros factores ambientales y genéticos. Las arrugas son una parte natural del proceso de envejecimiento y pueden aparecer en varias partes del cuerpo, siendo más comunes en el rostro y las manos.
Y si bien hoy somos cada vez más conscientes de la importancia de aceptar nuestra edad, lo cierto es que son tratamientos como el face taping los favoritos en las redes sociales. ¿La razón? se trata de un procedimiento fácil, que podemos hacer nosotras mismas en casa y que además, es económico.
De qué se trata
El face taping es una técnica de belleza que implica el uso de cintas adhesivas, generalmente cintas de tela o de silicona, para temporalmente estirar o tensar la piel de la cara con el objetivo de reducir la apariencia de las arrugas.
La idea detrás es poder crear un efecto lifting temporal al estirar la piel. Además, muchas aseguran que con el tiempo, se mejora la apariencia de la piel. Eso sí, es recomendable consultar con un dermatólogo para determinar si este tratamiento es adecuado para nosotras.
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