Analía López Angriman (Anita para propios y ajenos) es una diseñadora de interiores argentina que lleva su oficio por el mundo. Estudió en Buenos Aires y trabajó en Argentina, Uruguay, México y Arabia Saudita. Pero hace cinco años, la vida laboral de su marido la llevó a trasladarse a Mabella, la ciudad y balneario de la Costa del Sol española, y allí desplegó sus saberes.
"Nací en Haedo, pero me fui a zona Norte cuando me casé. Estudié Diseño de Interiores en la ABM (Asociación Biblioteca de Mujeres). Viví en Ciudad de México , Riyadh, Arabia Saudita y aquí en Marbella, España, desde fines 2018. Con Fernando, mi marido, y mis dos hijas, decimos siempre que somos ciudadanos del mundo”, se presenta.
En Marbella, donde Anita tuvo que empezar otra vez desde cero, un perfil de Linkedin le abrió la puerta para dar con Helena Ortega, una ex modelo y fisioterapeura que se volcó al diseño de interiores y buscaba profesionales para sumar a su staff. Entre ellas, cuenta, hubo magia, y buen feeling.
Hoy, Anita tiene un rol troncal dentro de Hache Estudio, el bureau desde donde comanda reformas y ambientaciones tanto residenciales como comerciales. Las formas orgánicas, los colores neutros y los materiales nobles, son parte de su sello.
“Siempre vuelvo a empezar en donde estoy, porque amo lo que hago”, dice.
-¿Cómo fue empezar de cero en un nuevo país?
-Tuve que pagar bastante derecho de piso, porque si algo abunda en Marbella son los diseñadores de interiores. Pero de a poco me fue instalando, tejiendo contactos, haciéndome conocer. Marbella es una ciudad donde la mayoría no son los españoles, sino los extranjeros: ingleses, italianos, dinamarqueses, franceses. Y el cliente que contrata a un diseñador no es español. Pero además, es una ciudad muy turística. Esto hace que por un lado tengas mucha oferta de departamentos de alquiler temporario, espacios que se decoran (acá las propiedades para venta o alquiler se entregan amuebladas) con un estilo neutro y, apto para todo el mundo
-Esa neutralidad a la hora de ambientar un espacio, ¿cómo se materializa?
-Aquí en Marbella todo se decora como un hotel, con mucho uso del blanco, tanto los departamentos que son de alquiler temporario como los que salen a la venta. Como todos se ambientan pensando en un público muy diverso; entonces lo más seguro para un diseñador es la neutralidad.
-Y vos, desde tu trabajo para Hache estudio, ¿te subís a esa tendencia?
-No, para nada. Yo soy argentina, me gustan los espacios cálidos, las formas orgánicas, las maderas macizas (acá se usan mucho los laqueados), las telas livianas o con cuerpo, pero naturales. El lujo para el diseñador local es sinónimo de brillo; para mi el lujo es usar una buena tela.
-¿Te atás a las tendencias?
-Me gusta seguirlas, porque las tendencias te obligan a cambiar, a renovarte, y yo si no cambio me aburro.
-¿Cómo es la arquitectura marbellí?
-Muy fea para mi gusto, porque son espacios muy pero muy chicos (todo en Europa es medio así) y con ventanas también muy chicas, un rasgo típico de la influencia árabe. Esa cualidad me costó mucho, porque en las casas prácticamente tenés que esquivar muebles.
-Y desde tu rol de diseñadora, como contrarrestas esa característica de la arquitectura?
-Apelo a los muebles de formas orgánicas, que permiten otros ángulos y alivianan el resultado final. Me gustaron siempre las formas orgánicas (tengo mucha influencia de Philippe Starck) porque permiten más ángulos de circulación libre por los ambientes.
-¿Qué implica lujo en tu trabajo?
-El lujo es sinónimo de comodidad, confort, espacio, personalidad, de ser diferente al resto. Lujo son los mteriales nobles de calidad, los materiales diferentes, que el espacio tenga algo raro, que te sorprenda.
-Algún material nuevo que te haya sorprendido y estés adoptando?
-El limestone, una piedra natural de alta resistencia color off white y apta para ambientes interiores y exteriores, factible de adaptar a muebles o usar como revestimiento.
De Argentina para el mundo
Desde su pied á terre en Marbella, Anita aprovecha para sumarse a cuanta feria de diseño haya por Europa. En breve, la gran Feria de Milán la encontrará entre sus vistantes. Allí buscará algunos de los diseñadores de sus favoritos dentro del mundo de la deco, como la diseñadora americana Sarah Sherman Samuel, la arquitecta francesa India Mahdavi, la inglesa Ilse Crawford, con quien se idenficica plenamente, la arq. Italiana Paola Navone.
Pero además, pondrá el foco en el diseño de muebles, una materia pendiente en la que que en breve empezará a incursionar junto a un carpintero sevillano.
-¿Preferís el diseño de interiores residencial o comercial?
-Prefiero el residencial, pero entre los pendientes, tengo el diseño interior de un hotel, eso me encantaría. A lo largo de los años, he trabajado en villas y apartamentos completamente nuevos que solo requieren amueblarse, hasta renovaciones y restaurantes.