Si estás buscando una forma de renovar tu cocina y darle ese toque de diseño con actitud, los azulejos con relieve pueden ser una opción.
Esta tendencia viene pisando fuerte y no es para menos: aporta textura, movimiento y un efecto visual único que transforma el espacio. Así que esta temporada (y las que se vienen) ¡olvidate de las paredes lisas y aburridas!
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Por qué los azulejos con relieve son tendencia
Ya es sabido que el diseño de interiores está dejando de lado lo plano y monocromático para abrazar superficies con carácter. Los azulejos en 3D logran jugar con la luz y las sombras, creando profundidad y dinamismo.
Además, combinan a la perfección con materiales como la madera, el mármol y el acero inoxidable, logrando un balance entre lo moderno y lo acogedor.
Otro punto a favor es que se adaptan a cualquier estilo: desde una cocina minimalista hasta una más rústica o industrial.
Además, con la tecnología actual, hay opciones súper innovadoras en cerámica, porcelanato y hasta materiales ecológicos.
Tipos de azulejos con relieve que son tendencia
- Ondulados: crean un efecto de movimiento súper sutil y elegante.
- Geométricos: ideales para cocinas modernas y vanguardistas.
- Efecto artesanal: texturas que parecen hechas a mano, perfectas para un look rústico o boho.
- Metálicos y brillantes: para quienes buscan un toque glam y sofisticado.
- Inspirados en la naturaleza: con texturas que imitan piedra, hojas o agua.
Sumar azulejos con relieve a las paredes no solo es una decisión estética, sino también sensorial. Y es que como mencionamos anteriormente, dan sensación de profundidad, captan la luz de distintas formas y pueden hacer que un espacio pequeño se sienta más amplio.
Y por supuesto que también agregan calidez y personalidad sin necesidad de sobrecargar con colores o accesorios.
Con qué combinan bien
- Madera clara o natural: un mix perfecto para un look nórdico y acogedor.
- Mármol o granito: ideal para cocinas sofisticadas y elegantes.
- Metales oscuros (negro, cobre o dorado): para un toque industrial y chic.
- Colores neutros: si querés que el protagonismo se lo lleve la textura de los azulejos.
- Detalles en color: si apostás por azulejos blancos o neutros, podés jugar con detalles en tonos vibrantes para darle más onda.
Fotos: Pinterest.
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