Cocinas estilo farmhouse: cálidas, rústicas y muy hogareñas
Inspirado en las viviendas de los agricultores norteamericanos, este estilo de decoración es uno de los favoritos para aplicar en esta estancia del hogar gracias a su calidez y encanto natural. Mirá estas propuestas e inspirate para darle un look de granja a tu cocina.
El origen del estilo farmhouse se remonta en Estados Unidos y está inspirado en las antiguas casas de campo de los agricultores norteamericanos. Es por esta razón, que también es popularmente conocido como 'estilo granja'.
Hoy, varias décadas después, su impronta sigue vigente y gana terreno en las diferentes estancias del hogar, sobre todo en las cocinas, transformándolas en un espacio cálido, rústico y lleno de encanto.
A pesar de proceder del campo y tener aires rústicos muy marcados, también se caracteriza por incorporar toques modernos y vintage, dando como resultado un equilibrio perfecto ideal para aplicar en todo tipo de casas.
Claves para decorar tu cocina con estilo farmhouse
Una paleta cromática luminosa
El blanco en todas sus variedades, los neutros y los crudos, son imprescindibles en las cocinas con este estilo. No sólo serán los encargado de aportar un plus de luminosidad, sino que además sumará ese toque moderno, sofisticado y atemporal que combina con todo. Suelen estar presentes en mobiliario, revestimientos y diferentes tipo de textiles como manteles, cortinas, repasadores, etc.
La madera como protagonista
La madera es la mejor aliada para darle a la cocina un look de granja. Suele estar presente en revestimientos, techos con vigas, mesadas, islas, mobiliario y diferentes detalles decorativos. Además de aportar calidez, aporta ese toque rústico y acogedor que tanto caracteriza al estilo farmhouse.
Piezas vintage
Las piezas recuperadas son un must have de este estilo decorativo. Puede ser una mesa, una alacena, un vajillero o incluso el marco de una ventana o puerta. Eso sí, es clave no abusar y sobrecargar la cocina con detalles vintage.
Los detalles decorativos vintages
Vajillas, jarrones, platos, ollas, carteles metálicos recuperados, cuadros con imágenes y frases, se hacen presentes en las cocinas con estilo farmhouse y aportan un sabor campestre inigualable. Otros detalles decorativos como flores secas, objetos de fibras naturales como lámparas, alfombras y canastos, también se hacen presentes pero en menor cantidad.