Cómo limpiar el extractor de la cocina y dejarlo impecable
 

Cómo limpiar el extractor de la cocina y dejarlo impecable en minutos

Está ahí arriba, aguantando vapor, humo y grasa. Pero si no lo limpiás seguido, puede dejar de funcionar bien (y hasta ser peligroso). Acá te contamos cómo dejarlo impecable de forma fácil y rápida.
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Si hay algo que junta grasa con entusiasmo, es el extractor. Está ahí arriba, silencioso, bancándose todo el humo, el vapor y las salpicaduras. Pero cuando lo mirás bien, la realidad pega: necesita una limpieza urgente.

Y no, no hace falta desarmar media cocina ni llamar a un técnico. Con estos pasos, lo dejás como nuevo en pocos minutos.

Cada cuánto hay que limpiar el extractor

La frecuencia ideal depende de cuánto lo uses. Si cocinás todos los días, una limpieza profunda cada 2 o 3 meses es lo ideal. ¿Usás delivery más seguido que la hornalla? Podés estirarlo un poco más. Pero al menos una vez por temporada, el extractor necesita amor.

Paso a paso para dejar el extractor impecable

1. Desenchufalo o apagá la llave de luz

Antes de meter mano, seguridad ante todo. Que no sea el día que te electrocutás limpiando el extractor.

2. Sacá los filtros

La mayoría se desmonta fácilmente. Si no sabés cómo, buscá el modelo en Google o fijate en el manual (sí, ese que sabés dónde está).

3. Remojalos en agua caliente y desengrasante

Poné los filtros en una fuente o la bacha con agua bien caliente y un buen chorro de desengrasante (puede ser también vinagre blanco con bicarbonato). Dejalos actuar 15-20 minutos.

3. Cepillá con ganas

Usá un cepillo o esponja que raspe, pero que no raye. ¡Vas a ver cómo se va la mugre! Si hace falta, repetí el proceso.

5. Secalos bien antes de volver a colocar

Podés secarlos con repasador o dejar que escurran bien al aire.

6. Limpieza exterior

Con un trapo húmedo y un poco de detergente, limpiá el cuerpo del extractor. Si es de acero inoxidable, usá productos específicos para no opacarlo.

    ¿Y si tiene filtro de carbón?

    Algunos extractores tienen filtros de carbón activado (los que no se pueden lavar). En ese caso, hay que cambiarlos cada 6 meses o cuando veas que ya no filtran bien. Lo bueno es que se consiguen fácil y se reemplazan sin drama.

    Por qué es clave mantener el extractor limpio

    Porque un extractor sucio no solo deja de funcionar bien (y empieza a hacer ruido o largar olores), sino que acumula grasa que puede terminar siendo un foco de incendio.

    Fotos: Pinterest.

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