Esta torta se endulza con las manzanas y toma toda su personalidad con la canela. Para que te animes a preparar algo diferente y, así, empezar a a acostumbrar el paladar a otros sabores.
Una receta muy simple que no lleva azúcar, pero que no por eso deja de ser súper sabrosa: no viene nada mal para habituarnos a comer menos azúcar, algo que resulta muy beneficioso para la salud. Con estas cantidades te sale una tarta de 18 centímetros de diámetro para unas 6 personas, en un tiempo de preparación de 55 minutos, aproximadamente.
Paso 1: Precalentá el horno a 180ºC y engrasa con rocío vegetal un molde redondo (preferiblemente desmontable) dee unos 18-20 cm de diámetro.
Paso 2: Lavá las manzanas, quitales la cáscara y rallalas finas o picalas. Cuanto más pequeños sean los pedacitos, más se fundirán en la masa. Rocialas con el jugo de limón y reservá.
Paso 3: Poné el resto de los ingredientes y batí o procesá, sumá las manzanas hasta obtener una mezcla homogénea.
Paso 4: Colocá la mezcla en el molde y cubrí con las almendras y la canela, luego llevala al horno durante unos 40-45 minutos.
Paso 5: Transcurrido este tiempo, comprobá con un palillo (que debe salir seco) que la masa esté cocida. Podés sumar un poco más de canela para servir.