Escribo las primeras líneas de esta edición un lunes. Fui a comprar un aromatizador e inciensos un espacio que amo cerca de casa donde venden velas, piedras, aceites esenciales, cuencos, y todo tipo de cosas energéticas. Al salir te invitan a sacar una carta de un oráculo o tarot, ángeles o mensajes luminosos.
Mi mano izquierda (la del corazón) sacó “La Torre” y su mensaje no pudo haber sido más atinado. Hablaba de los pensamientos y las emociones, y de que no importa cuán alta es la torre sino cuán firmes son los cimientos. Porque cualquier tormenta o tempestad, si no está construida sobre bases sólidas que integren la razón y la emoción, la pueden derribar.
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Para la astrología y la energía del universo empezó la temporada de eclipses. ¡Qué miedo cuando vienen los eclipses!. Antiguamente, los pueblos creían que el sol moría en plena jornada, de forma apocalíptica. O también que algún animal de las constelaciones se comía a la luna, o se enamoraba de ella. Científicamente - y simbólicamente - los eclipses vienen a mostrar que donde hay luz también hay sombra y donde hay sombra es donde más se ve la luz.
Estos eclipses que llegan en septiembre se dan en Piscis y Virgo, que son opuestos complementarios. Cada signo del zodíaco tiene su contraparte representada por la luna llena del mes. Los signos de agua tienen su opuesto en tierra. Los de aire en fuego. Y viceversa.
Yo soy piscis y mi ascendente es virgo. Pensamiento (tierra) y emoción (agua). ¿Por qué se los cuento ahora? Porque creo que nadie es una sola materia/personalidad en esta vida. Somos un poco de esto y de lo otro, de nuestro padre y nuestra madre, de las circunstancias que nos rodean, del yin y el yang. Y hoy estoy viviendo más que nunca ese vaivén, péndulo entre lo que pienso y lo que siento, lo que quiero ser y lo que debo ser. Algo similar a “Fides et ratio”, título de la encíclica de Juan Pablo II. Y no logro encontrar el centro, el equilibrio. La pregunta es ¿se logra encontrar el equilibrio? Y una vez que aparece, ¿Cuánto dura?.
En el todo está el opuesto complementario. Donde hay luz también hay sombra, donde está lo femenino también está lo masculino. El problema aparece cuando estamos polarizados. Poder sacar la parte masculina en mí, la de la acción, la de la producción, el impulso y la estructura, es algo que me cuesta un poco más. Pero quedarme constantemente en la fluidez, en el ideal, en la creatividad, puede ser muy agotador.
El mundo sufre las consecuencias más terribles cuando está polarizado. Las guerras se desatan cuando se llega a los extremos. ¿Cómo integramos lo femenino con lo masculino? ¿Cómo podemos estar en paz con nuestros polos opuestos? Al final de cuentas los opuestos son las dos caras de la misma moneda.
Hoy escuchamos y leemos constantemente la frase de “SÉ VOS MISMA/O”. Como si eso fuera tan fácil. Lidiar con mis polaridades es uno de los desafíos más grandes en este momento. Aprender a ser, simplemente ser/sentir/estar PRESENTE me resulta casi como construir la torre yo solita con mis dos manos.
Durante mucho tiempo- me animo a decir toda mi vida- aprendí a SER ajustándome y acomodándome a lo que el resto esperaba de mí, o al menos yo creía esperaban de mí. Vengo de una familia con mucha exposición mediática, donde era sumamente importante dar el ejemplo y salir “divina” en la foto.
En la mayoría de los casos el uso de la palabra o la expresividad de lo que uno realmente sentía era algo que no se podía decir (precepto que por supuesto marca a la gran mayoría de las generaciones anteriores). Allí donde lo masculino era bien de macho y lo femenino era bien estético. Yo respondí, como buena hija y nieta mayor (de ambos lados), de una forma muy obediente y prolija a esos patrones de comportamiento que venían acompañados de un nivel de exigencia extrema.
Hoy estoy rompiendo, o como se dice “deconstruyendo” esa dinámica interior. Y me encuentro con una Emilia que no sabe muy bien quién es, o quién quiere ser. Entonces aparecen los opuestos complementarios, esa manía de ordenar, organizar, exigir y darle forma a las ideas por un lado, y sentir, fluir, expresar todo por el otro.
Miro para atrás y entiendo tantas cosas del camino que tomé hace unos años. Mis ganas por volver a esa niña que se encerraba en su cuarto y creaba mundos mágicos combinado con la mujer que debía tomar las riendas de su vida como madre y profesional. Entendí que ir a buscar a las mujeres de la historia latinoamericana (MULANAS) era buscarme a mí misma, mi propia voz.
Acepté que no soy todo luz, ni todo sombra y que no puedo esperar tanto de otra persona porque en realidad eso es justamente el reflejo de la exigencia propia. Ahora sé que puedo ser yo misma, y sin embargo … no lo tengo muy claro. ¿Será que hay que animarse, explorar, e ir por los sueños con los pies en la tierra?. Despojarse del “qué dirán” y equivocarse para seguir aprendiendo. ¿Qué pasaría si me muestro tal cual soy? ¿Y si hago lo que realmente siento? CAOS El planeta va a seguir girando alrededor del sol y la luna va a seguir girando alrededor de la tierra. CALMA
La tierra también está cambiando. El mundo está cambiando. Este es el año de la serpiente. Significado: mucha transformación, cambiar la piel. La energía Kundalini que se practica a través del yoga, es una energía invisible del cuerpo. Nace en la base de la columna y va subiendo por los chacras hasta alcanzar cierto grado de crecimiento espiritual, como lo haría una serpiente. Hace miles de años que el centro neural de esta fuerza reside en el Tíbet, tal cual lo muestran las películas. Pero ahora resulta que se trasladó al hemisferio sur, concretamente en la Cordillera de los Andes; donde habita, además, la energía femenina de la Pacha Mama.
De todo esto estuvimos hablando con mi amigo Guz (les dejo su cuenta) con quien comparto todo tipo de ideas conspirativas sobre nuestras verdaderas raíces ancestrales y la misión de cambiar el mundo (somos dos ilusionados). También me reveló (es un apasionado de la genealogía) que soy descendiente por el lado de mi padre, de Manco Capac y Juan de Garay. ¿Existe algo más contradictorio que eso? Jajaja.
Aparece siempre esto de los opuestos. Estamos integrando esa energía de transformación a nuestras vidas, rompiendo estructuras y de a poco permitiendo que la expresión libre y genuina marque el punto de partida hacia un nuevo paradigma. ¿Cómo será? Nadie lo sabe, pero queremos creer que: MÁS EQUILIBRADO. Y en ese desplazamiento pendular (puedo/no puedo , quiero/no quiero) voy dando pequeños pasos hacia una Emilia verdadera con todas sus contradicciones.
Mi tía Dolores me dijo una vez algo que me quedó muy grabado. “Hay que aprender a usar nuestro grifo”. A veces tenemos ese impulso creativo, esas ganas de dejar fluir, expresar todo lo que tenemos adentro. Entonces abrimos la canilla y que corra el agua. Pero también conocerse es aprender a cerrarla y atender otras cuestiones, más prácticas, más ordenadas y regidas por la razón. Cuando lo regulamos es cuando integramos esas dos partes nuestras, el COMPLEMENTO.
Ante anoche, mi hija más chiquita, del signo de virgo - la que me baja a tierra y me recuerda mi responsabilidad como mamá - se quedó dormida en mi cama después de leerle un cuento de la “Vaca Paca: la vaca sus miedos ataca”. Al día siguiente mientras la llevaba a hockey me dijo en el auto: “Mamá ayer te escuché. Me dormí pero igual te escuché”, “¿Qué escuchaste?” “Que lloraste mamá”. Piedra libre para mí.
Mi lado sensible le había dado rienda suelta a las lágrimas acumuladas por el cansancio, los pensamientos, los miedos (como la vaca Paca) y no creí que se iba a dar cuenta. Le pregunté si eso la había perturbado y me dijo que no. Le expliqué entonces que aún siendo adulta y mamá, también era como ella cuando está muy cansada y llora sin saber muy bien por qué. Los opuestos complementarios encontraron un equilibrio en ese preciso momento, como un eclipse revelador. Lo real está en los detalles y no hay que fingir.
“Cada uno es lo que es y no lo que debiera ser” Esto lo dijo JUANA MANSO una de las grandes educadoras de la historia Argentina, mano derecha de Sarmiento, escritora de novelas como “Los misterios del Plata” y por sobre todo una mujer que rompió con todo tipo de estructuras intentando conseguir un equilibrio en la vida a través de la INTEGRACIÓN de lo MASCULINO Y LO FEMENINO. Este año es el 150 aniversario de su fallecimiento.
Mis recomendaciones de la semana
Les dejo la cuenta de GUZ THEVENIN, ¡Un chamán moderno y gran conocedor de la cultura!
Mi libro de la semana: “Eisejuaz” de Sara Gallardo (y todos sus libros también!!) Una escritora que me viene a mostrar todas las luces y sombras, contradicciones, lo masculino y femenino en cada una de sus obras… que son tan diferentes entre sí ! ¡Una escritora con múltiples facetas, imposible de etiquetar! Imperdible.
Fuente: Emilia Zavaleta, @sermulanas
