Todo lo que hay que saber para adoptar este estilo de vida de manera responsable e incluir todos los nutrientes necesarios para contar con buena salud durante todas las etapas de la vida.
La conmemoración del Día Mundial del Veganismo este movimiento remite a la fundación de "The Vegan Society", asociación del Reino Unido, cuyo origen se remonta al 1 de noviembre de 1944.
Si bien es cada vez más una tendencia que se asocia principalmente a la alimentación. "Se trata de una filosofía de vida que también incluye cuestiones éticas relacionadas con el respecto a todas las formas de vida y su explotación", explica Neri Ruiz, Licenciada en Nutrición (MN 10699) miembro del Departamento de Nutrición de New Garden.
Según un estudio realizado a mediados de 2020 por la Unión Vegana Argentina (UVA) junto a la empresa Kantar Insights Division, la comunidad vegana-vegetariana en el país sumaba cerca de 5 millones de personas (12% de la población), tres puntos porcentuales más que en 2019. Además, este año, el Código Alimentario Argentino, incluyó la regulación en el rótulo de “alimentos veganos”.
Es importante diferenciar entre una alimentación vegana y alimentaciones: vegetarianas, flexitarianas, pescetarianas y lacto-vegetarianas.
-Una alimentación flexitariana es aquella en la cual una persona consume alimentos de origen animal menos de una vez a la semana. Por lo general, se trata de individuos que no consumen carne o derivados de animales en su dieta diaria, pero quizá sí lo hacen esporádicamente en una reunión familiar o encuentro con amigos.
-Por su parte, las llamadas “dietas” vegetarianas, tradicionalmente son ovo-lacto-vegetarianas, es decir, las personas que llevan a cabo este tipo de alimentación consumen huevo, lácteos y todo tipo de vegetales. En cuanto a los regímenes lacto-vegetarianos son aquellos en los cuáles se incluyen sólo lácteos.
-Por último, si hablamos de alimentación pescetariana, nos estamos refiriendo a aquella dieta vegetariana que incorpora el consumo de pescados y mariscos como única fuente de carne animal. En ocasiones, puede incluir huevo, lácteos y miel.
“Al contrario de lo que se cree, una alimentación vegana adecuadamente planificada por un profesional de la salud, es totalmente saludable, nutricionalmente equilibrada y compatible en todos los momentos de la vida incluyendo embarazo, lactancia, infancia, adolescencia, deportistas, vida adulta y vejez”, explica la Lic. Ruiz.
Diversos estudios ponen de manifiesto que una alimentación basada en plantas sostenida en el tiempo, "-que incluya un mayor consumo de fibra, vitaminas y minerales y un menor consumo de grasas saturadas y sodio- tiene un impacto positivo y beneficioso en la prevención y tratamiento de muchas enfermedades como: obesidad, diabetes, hipertensión e incluso enfermedades cardiovasculares".
Mientras aclara que esto se debe a que el "aporte de más frutas, verduras, legumbres, granos integrales, semillas, frutos secos y a su vez un menor aporte de alimentos de origen animal, carnes rojas y procesadas, desarrolla la producción de compuestos antioxidantes y antiinflamatorios promotores y protectores de la salud".
En ocasiones se dice que quienes llevan adelante un plan de alimentación vegano o vegetariano, suelen tener más anemia que la población en general. "Esta afirmación es falsa, ya que en el reino vegetal existen muchos alimentos ricos en dicho mineral, sólo hay que prestar atención a diversificar las comidas, aportando variedad de colores, texturas y sabores a los platos", aclara la especialista.
Algunos de los tips a tener en cuenta para reemplazar el hierro de la carne son:
Finalmente, la licenciada Ruiz señala: "Si la alimentación vegana se encuentra bien planificada y supervisada por un profesional de la salud, los nutrientes que se consideran más críticos como Calcio, Hierro, Omega 3 y Vitamina B 12, pueden cubrirse sin ningún inconveniente".