Shakira ya activa los motores para su presentación en la Argentina con el tour "Las mujeres ya no lloran". La artista colombiana pasará antes por Paraguay y por este motivo, decidió tomarse unos días para descansar en Punta del Este. Sin embargo, lo llamativo fue el sitio donde eligió hospedarse: la chacra de la familia De la Rúa en José Ignacio, Uruguay.
Si bien la relación con Antonio De la Rúa terminó hace más de una década, los rumores indican que están cada vez más juntos. Estos comenzaron a tomar más fuerza a fines de septiembre, cuando el empresario la fue a ver como un fanático más en el Global Citizen Festival en Central Park. Si bien su vínculo no terminó muy bien, ahora comenzaron a acercarse.
Según indicó el medio Univisión, ambos estarían vacacionando junto a Sasha y Milan, hijos de Shakira y Gerard Piqué, y Zulú y Mael, hijos de Antonito. De acuerdo a esta información, todos se quedarán en la finca la Colorada hasta que la artista retome los shows que tiene programados en Latinoamérica.
Sin embargo, la periodista Adri Toval aseguró que su relación es más amistosa que sentimental y que hay respeto, cercanía y cariño. "Se consideran familia, y a los niños les encanta pasar tiempo juntos, aseguró mi fuente", expresó la comunicadora.
Por otro lado, Jordi Martín había contado que De la Rúa dijo que tiene una amistad bonita con su ex pareja y que limaron sus asperezas hace unos tres años. De esta manera, el abogado forma parte del equipo de trabajo de Shakira y, por esa razón, la está acompañando. "Antonio de la Rúa, sé y me consta, se convirtió en un apoyo grande en la separación de Shakira con Piqué. Se convirtió en su hombro para llorar", destacó.
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La historia de amor entre Shakira y Antonio de la Rúa marcó una época. Fueron once años juntos, combinaron romance con trabajo y se convirtieron en una dupla clave dentro del pop latino. Pero detrás de las fotos perfectas y las giras interminables, el final tuvo mucho más de tensión, distancia emocional y, finalmente, un conflicto millonario que rompió para siempre cualquier puente posible.
Todo empezó a desdibujarse hacia 2010, cuando la pareja decidió tomarse una pausa. En ese momento, Shakira habló de una separación pactada “para crecer individualmente”, casi como si fuera un paréntesis y no un corte definitivo. Él había sido su mano derecha en la estrategia creativa y comercial, así que incluso separados seguían trabajando juntos. Pero puertas adentro ya no quedaba mucho del vínculo que habían construido al principio de su relación.
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