Sentir las emociones con mayor intensidad, experimentar con frecuencia incomodidad en ambientes sociales o crear una idea fija y no poder dejar de pensar y trabajar sobre ella, son algunas de las características que permiten identificar este tipo especial de personalidad.
El término fue creado en el año 1996 por la doctora e investigadora en psicología Elaine Aron, quien definió a las PAS como “aquellas personas que tienen un sistema nervioso sensible, que son conscientes de las sutilezas de su entorno y se abruman más fácilmente cuando se encuentran en un entorno altamente estimulante”. Su libro, “La persona altamente sensible: cómo prosperar cuando el mundo te abruma", fue traducido a 32 idiomas y es todavía un éxito de ventas mundial.
Son muchas las grandes figuras con PAS, como la actriz y comediante inglesa Miranda Hart, una de las primeras en hablar al respecto del tema. “Cuando descubrí que era HSP, realmente cambió y me salvó la vida”. Tuiteó Hart. Otras personalidades como Nicole Kidman y Alanis Morissette también se identificaron públicamente de esta forma.
Cómo identificarlas
Diferentes estudios confirman que una de cada cinco personas, es decir, un 20% de la población, tiene ese rasgo de personalidad que va en aumento. A la hora de identificarlo, los especialistas aseguran que se caracterizan por ser perfeccionistas, intensas, ultracreativas, intuitivas, empáticas y que además contagian esas aptitudes.
“Cuando descubrís el rasgo, entendés el porqué de muchas de tus actitudes y necesidades y ahí es cuando te dejás de traicionar a vos mismo”, comentó Karina Zegers, coach y fundadora de la Asociación de Personas con Alta Sensibilidad de España (Apase). Una de las principales voceras de la alta sensibilidad en el mundo hispanohablante y autora de los libros “La alta sensibilidad” y “Personas altamente sensibles”. Además, aclara que no es un trastorno, sino un rasgo de la personalidad, de hecho, le llaman “tener el rasgo”.
Para alguien que lucha con su lado sensible, lo mejor es conocerlo, entenderlo y abrazarlo. Y para poder sacar el máximo partido, el autoconocimiento es la principal clave
Karina Zegers, coach y fundadora de la Asociación de Personas con Alta Sensibilidad de España
Cuáles son los rasgos positivos de una PAS y cómo sacarle provecho
Jorge Garramuño, médico psiquiatra del Centro Estima y referente de OSDE, comentó que a pesar de la condición, se pueden encontrar rasgos positivos: "Quienes sostienen la existencia del rasgo que denominan PAS hablan acerca de una intensa emocionalidad, que se manifestaría en la posibilidad de experimentar entonces con esa intensidad las emociones en general, sean estas placenteras o displacenteras. Desde ahí, podría pensarse como positiva la posibilidad de registrar con mucho placer las experiencias agradables".
"Hablan también acerca de la desarrollada empatía que tendrían estas personas. Esa cualidad podría ser beneficiosa en el vínculo con los demás, favoreciendo por ejemplo el trato o atención personal, como así también la conformación de equipos de trabajo", cerró el médico.
¿Cómo lidiar con esta personalidad?
Las personas que poseen este rasgo suelen tener dificultades en el desarrollo de su día, ya que por su sensibilidad, cualquier pequeña situación puede generarles incomodidad o ansiedad. Por eso, para no sufrir esta condición, lo primordial es estar informado y tener las mejores herramientas para que sea un aspecto positivo y no una carga en la rutina.
Especialistas, psicólogos y terapeutas pueden ayudar a transitar el proceso de reconocimiento, haciendo énfasis en trabajar sobre la fortaleza que implica esta alta sensibilidad para quien lo padece, pero también para los demás.
Para que las personas altamente sensibles no lo sufran, el primer paso, y el más importante, es que se acepten. Aprender a establecer límites y tomar tiempo para descansar y recuperarse de estímulos intensos es primordial para su salud emocional.
Otro punto importante es realizar disciplinas que generen calma y bienestar, como practicar técnicas de relajación o ejercicios como el yoga o la meditación, actividades que van a sumar bienestar integral a sus vidas. Además, rodearse de personas comprensivas y empáticas va a equilibrar la vida de quienes tienen PAS.
En una realidad que transcurre a toda velocidad, donde las relaciones personales se pierden y mezclan entre redes sociales, contactos mediatizados y avances tecnológicos, las personas con sensibilidad extrema parecieran ser la esperanza para un futuro que necesita de actitudes comprensivas, intuitivas, creativas y empáticas que contagien su luz propia, un aspecto fundamental que no tenemos que olvidar para las relaciones humanas.