Lo que hace unos años parecía algo extraño, hoy forma parte de las picadas y comidas más cotidianas: el hummus, una pasta de garbanzos cocidos y procesados con jugo de limón, pasta de sésamo, aceite de oliva y condimentos.
"Tiene una excelente calidad nutricional con un alto aporte de proteínas y fibra que derivan de su principal ingrediente: el garbanzo. Esta legumbre, además, aporta calcio, hierro, zinc, vitaminas del complejo B, entre otras vitaminas y minerales, es económico, tiene un bajo contenido de grasas, antioxidantes y ayudarían a reducir los niveles de colesterol LDL (“malo”) en sangre. En una porción (aproximadamente, 2 cucharadas soperas) aporta sólo 50 kcal", explica la Lic. Guadalupe Matos, nutricionista (M.N 9906 – M.P 5028).
Esta preparación puede ser buena opción para comenzar a aumentar nuestro consumo de legumbres, que a veces cuesta o quizás no sabemos de qué manera sumarla a nuestro plan de alimentación.
¿Cómo podemos consumirlo? En desayunos y meriendas, para untar en las tostadas; también como un dip para las picadas para comer con talitas integrales, bastones de apio o zanahoria y como acompañamiento en nuestros platos principales: podemos usarlo como aderezo en reemplazo de los industriales. "De esta forma, mejoramos la calidad de nuestra alimentación y aprovechamos todos los beneficios que nos brindan los garbanzos", explica la especialista.
"Para poder realizarlo en casa, te recomiendo remojar los garbanzos durante 12 hs, enjuagarlos y hervirlos. De esta forma, se mejora la digestibilidad y la absorción de los nutrientes. Luego, se procesan con jugo de limón, semillas de sésamo, aceite de oliva y los condimentos que más te gusten", finaliza.
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