En un móvil de Los ángeles de la mañana, Pampita salió en defensa de su marido, Roberto García Moritán, luego de la pelea que el diputado electo protagonizó en vivo en con Flavio Azzaro en Polémica en el bar.
Primero, la modelo habló del merecido triunfo de su marido en las elecciones, y de la banca que asumirá el mes próximo como diputado. "Se lo merece, trabajó mucho, muchos años, algunos más visible que otros, hace mucho que está con lo social, le encanta, quiere aportar un montón de cosas, quiere defender al rubro gastronómico que está muy golpeado", dijó la modelo.
Luego, cuando le preguntaron si lo ve en unos años como candidato a jefe de gobierno o inclusive a presidente, Pampita dijo "yo no veo nada, vamos viendo el día a día, hoy es esto, él lo toma con mucho respeto y responsabilidad y la familia lo apoya".
Más tarde, el panelista quiso saber qué sintió con la pelea con Flavio Azzaro, quien le dijo a Moritán que cuando lo dejara Pampita tenía que ponerse un kiosko. "Primero que ser mi marido no es ningún insulto", aseguró la modelo y conductora. "Y Rober no se lo toma así, como un insulto, así que si la idea era esa no funciona como insulto porque para Rober es un orgullo, está muy contento con la familia que formamos, yo lo amo con toda mi alma, qué más puede pedir", agregó.
"Y después, lo de ponerse el maxikiosko tampoco es un insulto, ponerse un maxikiosko tener un laburo, no? Está bueno? De todas maneras Rober hace más de veinte años que está en el rubro de la gastronomía, le ha dado empleo a más de mil personas en estos veinte años...", continuó.
Por último, el panelista quiso saber qué sintió con la chicana que su marido recibió en el programa Polémica en el bar. "Siento falta de educación, falta de respeto por el invitado... además Rober fue con la mejor onda, no se esperaba nada de todo esto", dijo Pampita. Y agregó: "Mi panelistas no maltratan a nadie, pero hay formatos que funcionan de otra manera y en eso no me puedo meter".