#LasElegidas, Nadia Muzyca, primera bailarina de la danza clásica argentina: "Siempre dije que hay que retirarse a tiempo" - Revista Para Ti
 

#LasElegidas, Nadia Muzyca, primera bailarina de la danza clásica argentina: "Siempre dije que hay que retirarse a tiempo"

Nuevamente en Para Ti #LasElegidas, la sección en la que entrevistamos a diferentes mujeres que supieron luchar en su ámbito, destacarse y convertirse en referentes en sus ámbitos. Compartimos sus historias de vida y celebramos sus logros: son inspiración para todas. Esta vez te presentamos a Nadia Muzyca.
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A los 9 años era una nena inquieta que le ponía coreografías a las canciones de Carlitos Balá. Entonces su mamá, Sonia, con la idea de que ella canalizara toda esa energía, la anotó en la escuelita de danza del barrio. Lo que jamás imaginaría era que, 6 años después, la vería por televisión bailando como partenaire de Julio Bocca en el escenario del City Center, en Nueva York.

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca

Con estas breves líneas introducimos la charla íntima que Para Ti tuvo con Nadia Muzyca, quien hace poco más de dos meses se retiró de la danza clásica profesional, a sus 42 años, siendo la Primera Bailarina del Teatro Colón. En su pasado fue lo que se dice, una nena prodigio (aunque ella se limite a decir que tenía "condiciones") y es, en su presente, una mujer "llena de ilusiones", como le sale describirse.

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca.

Nadia creció en Quilmes, en esas típicas cuadras con casas bajas y jardines llenos de flores. Con veredas anchas que servían de escenario a todo tipo de actividades infantiles: bicicleta, patines, pelota, soga. Pero lo de ella era, claro, la danza, que practicaba con sus primas. Súper unida a su familia y, sobre todo, a su abuela -se le endulza la voz al evocarla-, los férreos motivos por los que no quiso continuar su carrera en España, cuando a la edad de 20 años la quisieron contratar. Pero ya llegaremos a esa etapa de su vida.

Nadia Muzyca, de Quilmes al Teatro Colón

Nadia cuenta que baila desde que tiene "uso de razón". Llegó al Colón cuando su maestra le dijo a sus padres que la veía con las condiciones necesarias. "Vio que tenía condiciones y que me lo tomaba de otra manera que las otras nenas, que iban más a jugar, a pasarla bien. Yo también, pero lo que decía ella para mí era súper importante, 'algo serio' y me acuerdo que mi lugar en la clase era frente al espejo, para corregirme. Sumado a las condiciones que tenía, el físico, la maestra habló con mis papás y les propuso presentarme en el Colón", recuerda.

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca.

Después de superar tres complejas pruebas eliminatorias, Nadia quedaba seleccionada junto a otros 17 chicos y chicas entre los cientos que se habían presentado. Todavía no era consciente, quizás, de lo que eso significaba y que ahora ve con claridad: "Ahí cambió mi vida, me enamoré de la danza. No tuve dudas, a los 9 años, de que quería ser bailarina. Estaba en carrera dentro del Colón".

-¿Cómo fueron tu infancia y tu adolescencia teniendo esta pasión, esta responsabilidad y conjugarla con el colegio, los amigos, la familia?

-Fueron diferentes. Todos los días, después del Colón iba a la primaria. Para mis compañeros era "la bailarina", pero re bien, les parecía una novedad que yo fuera a Capital desde tan temprano. Muchas veces iba al colegio con el rodete, ni me lo llegaba sacar.

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca.

-O sea que la rutina era movidita...

-¡Sí! A la mañana iba a Capital, al Colón, luego volvía al colegio a Quilmes y muchas veces, volvía a Capital porque tomaba clases particulares... un esfuerzo terrible siendo una nena tan chiquita. Pero yo recuerdo que lo hacía chocha, con amor, yo quería ir a mis clases. Era una pasión, mi vocación, sin duda. Yo siempre digo que si la danza no te gusta mucho, no la aguantás porque es una cosa de todos los días. Es muy repetitivo, de probar hasta que sale. No es que sale de un día para el otro.

El sueño de bailar junto a Julio Bocca

"Mi adolescencia también fue distinta: a los 14 años ingresé al Ballet Argentino de Julio Bocca y ahí cambió mi vida, porque empecé a ser profesional y a viajar por todo el mundo junto a él, que estaba en la cresta de la ola, en el American Ballet. Era un rockstar, donde iba Julio los teatros se llenaban, la gente lo esperaba en la calle, se morían por verlo. En su compañía éramos 14 o 12 y yo era una de ellos, con 14 años, ¡una locura! A los 15 bailé con él de paternaire en Nueva York con una función que se emitía en vivo a la Argentina desde el City Center. Era la premiere de la obra que había llevado allí con su compañía y yo era la protagonista de una de ellas ¡una locura!

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca

Esos años fueron muy especiales, según su relato: "Viví cosas muy fuertes, hicimos una gira por los 5 continentes que duró 3 meses, con 16 años. Era muy pichona... en un momento en el que los chicos están con su viaje de egresados yo tenía una vida totalmente distinta. El secundario lo tuve que dejar porque viajaba tanto que me era imposible cursarlo. Intenté darlo libre, me llevaba los libros pero estábamos a full y cuando tenía un día libre, quizás estaba en Verona y ¡olvidate que me iba a quedar encerrada estudiando en el hotel! Me iba a recorrer".

De todos modos cuenta que terminó el secundario después, cuando no viajaba tanto, en una escuela nocturna cuando formaba parte del cuerpo de baile del Teatro Argentino de La Plata. "No estaba bueno no tener mi título secundario y como soy muy Susanita, pensaba 'El día que tenga hijos cómo le voy a decir que su madre no tiene secundario, qué mal ejemplo' entonces lo terminé",.

La familia, su prioridad

-¿Cómo fue para vos el rol de tu familia a lo largo de tu carrera?

-Fundamental, acompañándome en los viajes a Capital. También en el sentido económico, porque había que costear todo eso, comprar las zapatillas, pagarle a los maestros. Me siento muy agradecida porque, sin ellos, esto no hubiese sido posible. Y siempre pienso: 'Qué valor tuvieron mis papás al firmarme el permiso a los 16 años para salir del país'. Ni lo dudaron, yo me moría si no me lo daban. Pero mi mamá dejó ir a 'su nena' con 14 años al mundo, era literal, dejarme ir al mundo.

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca

-Cómo fueron las cosas cuando formaste tu propia familia. ¿Tu marido sabía en qué se estaba metiendo?

-Mauro trabaja como técnico en el Teatro Argentino de La Plata así que sin duda sabía lo que era estar con una bailarina. Siempre me apoyó, como mis padres. Sin él no hubiese seguido, hubiera sido imposible porque yo estando con él fue cuando me dieron el contrato de Primera Bailarina en el Teatro Colón. Tenemos dos hijos... así que el apoyo familiar fue fundamental.

Siendo bailarina, abogada o atendiendo un kiosco, trabajar y armar una familia es un gran desafío para las mujeres. Así lo vivió (y lo vive): "La mujer cuando sale a trabajar necesita que su pareja asuma otros roles ¡hacemos malabares! Nosotros nos repartimos, porque los dos salimos a la calle y a veces él llega antes que yo. Incluso, cuando viajo al interior a dar masterclass se queda con los nenes. Para mí es importante poder irme de mi casa y saber que está todo bien, que me apoya", explica.

Grandes logros en 28 años de carrera

Durante sus 28 años de carrera, Nadia Muzyca aprovechó todas ya cada una de las oportunidades que se le presentaron: bailó en los escenarios más reconocidos del mundo, como el Bolshoi, el Kirov y la Ópera de París.

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca

-¿Recordás el momento en el que dijiste: 'llegué'?

-Cuando bailé con Julio para mí fue una locura total. Otro momento importante fue cuando bailé mi primer protagónico, Giselle, que fue con el que me despedí, en el Teatro Argentino de La Plata. Otro momento importante -bisagra- fue cuando entré al Colón.

A los 20 años querían contratarla en España, a donde viajó para ver de qué se trataba la propuesta: estuvo allí durante un mes. "No lo acepté porque soy muy de mi país y de mi familia y sabía que si me iba, no volvía más porque iba a hacer mi vida allá. Y para mí era muy alto el costo que tenía", reconoce.

Pero defiende su decisión y está segura de que fue la correcta: "Amo la carrera que hice, estoy feliz con la decisión, sin duda fue acertada. Pero para mí era alto el costo de dejar a mi familia, a mi abuela, que en su momento era todo. No podía. Volví decidida y nunca me arrepentí".

Yo agradezco que trabajo de mi vocación. Trabajar de lo que uno ama, no tiene precio.

Nadia Muzyca: la decisión de retirarse y lo que se viene

-¿Cómo tomaste la decisión de retirarte?

-Siempre supe que me quería retirar bien. Quería retirarme a los 40 pero me agarró la pandemia, así que apenas volvimos, no tenía dudas de que era el momento, porque siempre quise retirarme bien, joven. Tengo 28 años de carrera, me sobrepasó con un montón de sorpresas y cosas hermosas: me han nominado como Mejor Bailarina en Moscú en los Premios Benoit de la Danza, que es como el Oscar de la danza, tuve satisfacciones enormes. No tuve dudas de que ya estaba.

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca

Su retiro es como bailarina clásica, aunque no descarta continuar bailando otros estilos y montando nuevos espectáculos. "Siempre dije que hay que retirarse a tiempo... yo siempre me quise retirar de la bailarina y no que la bailarina me retire a mí. Mi despedida fue soñada, hermosa, súper emotiva. Me fui como quise, bailando como yo quise, ¡hice lo que quise! (risas) y me encantó, es un montón. Fue un cierre perfecto en una etapa tan fundamental de mi vida".

Y también comenta, de cara al futuro: "Tengo tantos proyectos, estoy haciendo tantas cosas, que a veces no me alcanzan las horas del día. Todo el tiempo se me ocurren cosas nuevas. Esto me da mucha ilusión, creo que es fundamental. Y yo estoy llena de ilusiones, entonces eso me mantiene activa y contenta. Y que se dé lo que se tenga que dar. Uno se inspira y hace y el destino, dispone. Yo tengo ganas de hacer un montón de cosas y voy detrás de esos sueños", reflexiona.

-Y también sos una acompañante de los sueños de los demás, con tu escuela de danza

-¡Me encanta! Tengo mi escuela hace siete años. Amo a mis alumnas, amo enseñar y eso es algo que hizo que mi despedida de la bailarina clásica sea súper llevadera porque me encanta poder traspasar todo lo que aprendí en estos años. Y ver qué cambia mi aporte, ver el avance, porque son bárbaras. Me encanta poderlas acompañar en el camino de la bailarina que es largo, es difícil, pero es hermoso. Si les gusta, ¡es hermoso!

Nadia Muzyca
Nadia Muzyca

-Alguien que nunca bailó y que tiene ganas de hacerlo, ¿puede?

-Siempre, de hecho en el estudio tenemos clases para adultos, iniciación, donde va gente grande, que no sabe nada... ¡No hay que quedarse con las ganas de hacer un aleteo del Lago de los Cisnes! Mucha gente quería ser bailarina y porque los padres no las pudieron acompañar, no quisieron o les dijeron `no, para qué vas a ser bailarina', y se quedaron con ese sin sabor, pueden hacer una clase de ballet. Inclusive pueden llegar a bailar en puntas, obvio, preparándose, no es de un día para el otro. Con un trabajo adecuado y adecuando el físico, totalmente. Aparte, como gimnasia, la danza es súper completa porque movés absolutamente todo, ¡hasta el espíritu!

FOTOS: Ale Carra

VIDEO: Manuel Adaro

EDICIÓN DE VIDEO: Camila Uset

Más información en parati.com.ar

 

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