¿Sentís que a tu living le falta algo pero no sabés bien qué? Spoiler: puede que sea la alfombra perfecta. Ese detalle que une todo, da calidez, define zonas y suma estilo sin tener que redecorar desde cero.
Pero ojo, no cualquier alfombra sirve: hay que elegir bien el tamaño, el material y el diseño según cómo vivís tu casa.
Acá te dejamos una guía para que encuentres el modelo ideal y te enamores de tu living cada vez que entres.
La guía definitiva para elegir la mejor alfombra para tu living
1. ¿Para qué querés la alfombra?
¿Buscás delimitar el espacio del sillón? ¿Sumar calidez? ¿Tapar un piso que no te gusta mucho? Pensá en la función que va a tener tu alfombra perfecta: eso define el tamaño, el material y hasta el color.
2. Medidas que salvan
Regla básica: la alfombra debería quedar al menos unos 20-30 cm por debajo del sillón. Y si tenés mesa ratona, ¡que no le quede chica!
Lo ideal es que quede todo “contenido” arriba de la alfombra. Un modelo de 160x230 cm suele ser una medida intermedia muy funcional, pero si tu living es amplio, podés ir por más.
3. Estilos tendencia 2025
- Diseños geométricos suaves o degradés
- Texturas orgánicas como bucles, lanas tejidas o nudos
- Colores tierra (beige, terracota, visón) o tonos neutros como gris claro o piedra
- El toque divertido: franjas o bordes irregulares
¿Una apuesta segura? Los diseños que parecen tejidos a mano, imperfectos pero con mucha personalidad.
4. Materiales: lo que conviene según tu casa
- Si tenés mascotas o hijos: apostá a materiales lavables, resistentes y fáciles de limpiar. Las alfombras sintéticas tipo polipropileno o PET reciclado son ideales: no absorben tanto, se aspiran fácil y aguantan el trote.
- Para sumar calidez: las de lana o mezcla de fibras naturales son imbatibles. Dan textura, aíslan del frío y duran mil años.
- ¿Alérgicos en casa? Mejor evitá las muy peludas o de pelo largo, que acumulan más polvo.
5. ¿Color claro u oscuro?
Las claras amplían visualmente el espacio pero se ensucian más. Las oscuras disimulan manchas y marcas, pero pueden achicar visualmente el ambiente.
La posta: elegí un tono intermedio con algún tramado o textura que camufle un poco el uso diario.
6. El tip deco final: usala como punto de partida
¿No sabés cómo arrancar a decorar tu living? Empezá por la alfombra. Elegí una que te encante y después sumá almohadones, mantas o arte en los tonos que se repitan en ella. Te juro que todo se va a ver mucho más armónico.
La alfombra perfecta existe, pero no es igual para todos. Tené en cuenta tus rutinas, tus gustos y lo que necesitás en tu casa real.
Porque sí, una buena alfombra puede cambiar por completo el living... ¡Y hacer que te den más ganas de quedarte en casa!
Fotos: Pinterest.
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