Alimentar la autoestima, el camino para disfrutar del verano (y de la vida en general) – Revista Para Ti
 

Alimentar la autoestima, el camino para disfrutar del verano (y de la vida en general)

Alimentar la autoestima, el camino para disfrutar del verano (y de la vida en general)
El verano suele ser la mejor época del año para muchos y, para otros, un verdadero infierno: la falta de autoestima puede impedir que disfrutemos de exponer nuestro cuerpo, nos genera preocupaciones excesivas y malestares emocionales extremos. Una especialista nos ayuda a analizar esta cuestión y plantea un camino posible para salir adelante.
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Las exigencias ajenas, las propias, la disconformidad constante... estas y otras cuestiones nos pueden sumir en situaciones cargadas de tristeza, donde no le hacemos lugar al disfrute de ser una misma.

Esta columna que nos habla de la autoestima, de liberarnos de mochilas que no nos corresponden y nos ofrece un camino hacia el disfrute es de la Lic. Roma Tiberi (MN 65822) Psicóloga especializada en Imagen Corporal y Trastornos de la Conducta Alimentaria y quizás, el puntapié inicial a que te permitas trabajar en tu felicidad.

¿Sentís que el dolor por tu corporalidad no te da paz? ¿Querés aceptarte y quererte tal y como sos?

El verano, qué tema ¿no? Es como esa relación rara en la que lo amás pero, a la vez, te hace sufrir. Semanas, meses antes, la gente se desvive por alcanzar ese "cuerpo de verano" , o al menos uno "mejorcito".

Voy de vuelta, mejor dicho, "Uno que no sea motivo de vergüenza". Aquel que la gente mirará y no juzgará tan fuertemente. O por el contrario, aquel que la gente mirará y me admirará. O, mejor dicho, ¿que vos juzgarás o avergonzás?

En una sociedad que glorifica la delgadez, la belleza y romantizar la salud, la llegada del verano suele ser uno de los eventos más atemorizantes. Aunque haya un fuerte movimiento para la visibilización de la diversidad corporal, hay un aumento escalonado de la "ansiedad corporal", de los trastornos alimentarios y dismorfias. Y esto no es poca cosa. Es tanta la exposición que sufrimos que, cada vez más, somos rehenes de la opresión cultural, por nuestra forma corporal.

Abrís Instagram, charlás con cualquier profesional de la salud, buscás un traje de baño que te haga sentir cómoda, y lo único con lo que te encontrás es con el dolor del estigma.

Al compararte con cada influencer que sube una foto luciendo su cuerpo admirable al desnudo, al intentar modificar tu cuerpo siguiendo los tips de ejercicios de los “revolucionarios del fitness”, al intoxicarte de información sobre alimentación, sólo estás logrando despersonalizarte cada vez más. Alejándote de tu "auténtico yo", para poder dar respuesta a ese dolor profundo de sentirte excluida de esa hegemonía corporal que se te exige, que vos te exigís.

Buscás una respuesta a ese dolor en la modificación de tu cuerpo. Pero, dejame decirte que, aunque lo intentes todo y más, nunca será suficiente. Porque esa inseguridad y complejos con tu cuerpo no son más que un reflejo de una herida más profunda que hay que sanar.

Una herida que cada vez más es alimentada por el narcisismo y vacío de la cultura  que nos rodea. Una herida que nadie te enseña a sanar.

Nuestra herida corporal es una herida más profunda, que debemos buscar, con nuestra lupa, cuidadosamente y despacio registrarla, trabajarla y duelarla.. cómo también se duela el cuerpo "no perfecto".

El límite entre mi mirada y la mirada del otro es extremadamente fina, y a veces nos cuesta identificarla. Pero no me quiero quedar aquí, quiero que pensemos en cómo algo que anhelamos tanto -como la pausa del verano- queda totalmente sesgada y anulada por el sufrimiento y el dolor.

El cuerpo es ese "pero" que no nos deja disfrutar. Muchas veces ese "pero" en realidad es parte de nuestra modalidad de vida y no nos dimos cuenta. Siempre hay "algo” que hace que no podamos terminar de disfrutar, por eso siempre decimos que no importa cuantos kilos bajes "nunca será suficiente".

Pensemos cuánto sufrimiento, exigencia y crítica para pasar cuanto ¿una semana? ¿quince días? ¿un mes? en la playa o pileta. ¿Y el resto de tus días? ¿El resto de los meses? A veces pienso que hasta seria mas sencillo no irse a la playa y fin del tema. Pero entiendo que no viene por ahí está herida corporal.

Así que querida mujer, quiero que leas muy fuertemente, cuantas veces lo necesites: tu vida es hoy, es éste instante. No hay ayer, ni mañana. La construcción temporal es un invento del hombre, así que, correte de ahí.

Frases trilladas como "lo como hoy y mañana me cuido" o pensamientos como "me lo como todo porque después se va a acabar y yo no como estas", son las representa,tes de que no estás en conexión con tu presente.

Te invito a que te conectes con lo que querés sentir estas vacaciones. Hace un listadito de lo que te gustaría sentir.  Y que vayas en búsqueda de esa sensación. Que te animes a disfrutar, a conectar con el placer del momento, de tu vida. Porque, al fin y al cabo, ¿Qué somos? "Somos más que un cuerpo " (Katz, 2011). No busques ser esa imagen, estática, que solo busca ser admirada por el otro... buscá cuidarte y disfrutarte.

Por la Lic. Roma Tiberi (MN 65822) Psicóloga especializada en Imagen Corporal y Trastornos de la Conducta Alimentaria. Creadora y Directora de @Roma.Corporea, el único estudio terapéutico de Autoestima Corporal en Argentina. 

Más información en parati.com.ar

 

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