El síndrome de Rapunzel es un trastorno poco común, que se caracteriza por la ingestión compulsiva de cabello (por lo general propio). También, se lo llama tricofagia.
"El nombre del síndrome proviene del cuento de hadas de "Rapunzel", cuya larga cabellera se convierte en un elemento central de la historia", explicó el psicólogo Sebastián Ibarzábal (MN. 42.413).
A su vez, el especialista determinó que esta patología se puede dar por diversos motivos. "Por un lado, lo solemos encontrar asociado con otros trastornos psicológicos subyacentes, como la tricotilomanía (el impulso irresistible de arrancarse el cabello) o la pica (el consumo compulsivo de sustancias no alimenticias)", detalló el licenciado.
"Por otra parte, como todo trastorno compulsivo, se caracteriza por la presencia de pensamientos obsesivos recurrentes y comportamientos repetitivos", afirmó el psicólogo.
Asimismo, Ibarzábal subrayó que se han encontrado con que algunos factores biológicos, como la genética y la neuroquímica, pueden desempeñar un papel importante en su generación.
También, el licenciado detalló que, en la esfera psicológica, las experiencias traumáticas, el estrés crónico o los problemas emocionales pueden desencadenar o exacerbar los síntomas.
"En el consultorio, se ve a individuos que se sienten abrumados por ciertos aspectos de su vida y no encuentran una manera adecuada de hacerles frente. Estas conductas aparecen con la función de proveer calma y equilibrio a una psiquis desbordada", expresó el especialista.
Cómo tratar el síndrome de Rapunzel
Ibarzábal determinó que, para tratar el síndrome de Rapunzel, generalmente, se debe realizar una combinación de enfoques médicos y psicológicos.
"Debido a la ingesta de cabello, se puede generar una bola -que no se digiere- en el estómago o en el intestino. Esto se llama tricobezoar", afirmó el especialista.
Por ello, explicó que, en primer lugar, es importante analizar si se debe eliminar el tricobezoar mediante procedimientos endoscópicos o quirúrgicos.
"Complementariamente, desde el punto de vista psicológico, el trabajo es similar al tratamiento de cualquier compulsión. Hay que buscar descartar los comportamientos compulsivos graves, trabajar para invertir el hábito, tratar los pensamientos automáticos erróneos y las distorsiones cognitivas que subyacen", declaró el psicólogo.
Consecuencias del síndrome de Rapunzel
Ibarzábal declaró que, para abordar el síndrome de Rapunzel, hay que tratarlo desde dos perspectivas diferentes.
"Desde el punto de vista físico, la formación de un tricobezoar puede obstruir el tracto gastrointestinal, causar dolor abdominal, náuseas, vómitos, pérdida de peso, desnutrición e, incluso, perforación intestinal. Además, el consumo compulsivo de cabello puede provocar deficiencias nutricionales, trastornos metabólicos y complicaciones médicas graves a largo plazo", determinó el psicólogo.
Por otra parte, el licenciado aseguró que, desde el punto de vista psicológico, estas conductas tienden a traer problemas en los vínculos, sobre todo, aislamiento y encierro, muchas veces por incomodidad y vergüenza.
"Esto acrecienta la sensación de malestar existente, sostiene la tristeza y potencia los síntomas ansiosos de autoimagen negativa. Se termina entrando en un círculo negativo del cual es difícil salir", finalizó el especialista.
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