Messi reconoció que fue duro darle la noticia a la familia de que debían abadonar Barcelona por un tiempo y explicó cómo reaccionaron sus hijos y su esposa.
"Antonela estaba mal, pero me acompaña a donde sea, me bancó y me apoyó. Estamos preparados para lo que surja. Es un momento de felicidad para mi familia y para mí, después de días difíciles, de lo duro que viví en Barcelona", confesó el rosarino de 34 años, en diálogo con ESPN en París.
Thiago fue el más afectado
Luego confesó que lo más difícil fue decirle a sus hijos, que nacieron en Barcelona y prácticamente no conocen otra vida."Tuve que hablarles de Euro Disney, la Torre Eiffel, el estadio", aseguró.
Además, dijo que "al que más le costó fue a Thiago", su hijo mayor, que está grande y entiende un poco más. Messi será dirigido en el PSG por el argentino Mauricio Pochettino y tendrá como compañeros a sus compatriotas Angel Di María, Leandro Paredes y Mauro Icardi, más estrellas internacionales como el brasileño Neymar, el francés Kylian Mbappe y el español Sergio Ramos, entre otras figuras
Messi quiere ganar la Champions
"Hablé con Fideo (Di María), con Lea (Paredes) y Ney, vi un poco de París, algo de la Torre Eiffel, llego a un club donde tengo amigos, eso hace que toda la adaptación sea más sencilla. Es un plantel formado para ganar, quiero ganar otra Champions y sería extraordinario para el club lograrla por primera vez", resaltó Messi.
El crack comentó que mañana jueves realizará su primer entrenamiento con el plantel del PSG y que Antonella junto a los tres hijos del matrimonio, Thiago, Mateo y Ciro, regresará unos días a Barcelona.
"Mañana empiezo a entrenar y mi familia regresará a Barcelona para terminar de acomodar todo, no se cuando empezaré a jugar, tengo que ponerme bien físicamente y luego arrancaré", concluyó Messi en un día histórico, uno más en su extraordinaria carrera.