Mandy Moore, más conocida como Rebecca de This is us, compartió en sus redes sociales que nació su segundo hijo. "Ozzie está aquí" escribió la artista estadounidense en su cuenta de Instagram que rápidamente se llenó de mensajes llenos de amor de sus seguidores a los que también les compartió tiernas postales del bebé.
Sin anestesia
La actriz contó al medio Today Parents que tiene una enfermedad autoinmune, la trombocitopenia inmune (PTI), que le impide tomar cualquier tipo de analgesia durante el parto. Por eso, sus embarazos deben ser sin anestesia y suele realizar terapias que la ayudan a controlar el dolor.

Una entrega más fácil
Mandy Moore compartió algunos detalles sobre la llegada de Ozzie. "Oscar Bennett Goldsmith un poco tarde pero con mucho aplomo. Tuvo una entrega más fácil y rápida que su hermano mayor, para deleite de sus padres. Cada adagio es verdadero: nuestros corazones se han duplicado en tamaño y la inmediatez del amor es asombrosa. ¡Él está más allá de las palabras y estamos muy agradecidos por nuestra familia de cuatro" escribió la actriz en Instagram.

Una historia de amor llena de música
Mandy Moore es también cantante y fue gracias a la música que conoció a Taylor Goldsmith. La actriz escuchó a su actual marido en la radio y lo buscó por iTunes. La banda estaba por sacar un nuevo álbum que Moore compró y compartió por Instagram. Ahí ambos empezaron a hablar en el medio de la gira de presentación. Por eso, la música es muy importante para esta familia que están juntos desde el 2015 y tienen dos hijos.

La cantante que encontró su lugar en la televisión
Mandy Moore fue estrella pop a fines de los años 90, con su single Candy se hizo conocida a nivel mundial. Pero ella quería más y se dedicó a la actuación. Hizo varias películas, pero podríamos decir que su mayor éxito le llegó de la mano de This is us. La serie dramática con seis temporadas, que finalizó este año, fue una sensación en la televisión estadounidense que con sus capítulos lograba récords de audiencia. Una historia que nos hizo llorar a todos y que llevó a Moore a su tan merecido éxito.