Mientras Locomotora Oliveras lucha por su recuperación, muchos fanáticos recordaron en redes sociales su sacrificada historia de vida. En este duro momento, existen dos personas que no se despegan de su lado y la acompañan incansablemente: sus dos hijos. Ellos fueron sus pilares arriba como abajo del ring y hoy son su fuerza más preciada.
Alejandro Oliveras tiene 31 años, es de Santa Fé y tiene varias pasiones, entre ellos, el modelaje, la administración de empresas y entrenamiento. Heredó de su madre el amor por el deporte ya que se desempeña como personal trailer e instructor de boxeo. A través de sus redes sociales, muestra sus rutinas y estilo de vida.
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Por otro lado, el joven estudia periodismo por lo que tiene un costado más comunicador y que desea dedicarse al mundo de los medios. También es un apasionado de las motocicletas y ama recorrer las rutas a bordo de este vehículo.
Alexis Oliveras también se desempeña como instructor en el gimnasio de su madre, ubicado en Santo Tomé. Por otro lado, el joven de 27 años aspira a convertirse en un chef profesional ya que adora la gastronomía. A diferencia de su hermano, mantiene un perfil mucho más bajo y alejado de los medios.
Durante una entrevista, la boxeadora recordó cómo fue la infancia de sus hijos mientras ella se dedicaba a pelear. "Me perdí cumpleaños, fiestas, egresos… pero ellos sabían que todo era por un futuro mejor...Si no hubiera sido así, estaríamos los tres en la miseria", contó en una nota. "A los cuatro años ya sabían cocinar. Se cuidaban entre ellos cuando yo tenía que entrenar o concentrarme", aseguraba.
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