Mini carrot cake sin harinas con crumble: receta fácil y húmeda para la merienda
 

Mini carrot cake con crumble: receta fácil y express para tentarte en la merienda

Mini carrot cake con crumble: receta fácil y express para tentarte en la merienda
Con pocos ingredientes y sin harinas, esta versión húmeda y esponjosa de la clásica carrot cake se convierte en la opción ideal para preparar algo dulce en casa y acompañar la merienda.
Recetas
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Si sos fan de la torta de zanahoria, esta versión mini con crumble te va a encantar. Es húmeda, aromática y no lleva harinas, por lo que también es apta para quienes siguen una alimentación sin gluten. Se prepara en minutos y tiene ese toque crocante del crumble que la hace irresistible.

Ingredientes

  • 2 huevos
  • 100 g de azúcar mascabo
  • 100 ml de aceite
  • 100 ml de leche
  • Esencia de vainilla
  • 230 g de almendras molidas finamente
  • 2 zanahorias medianas crudas ralladas
  • 2 cucharaditas de polvo de hornear
  • 1 cucharadita de canela en polvo
  • 1 puñado de nueces picadas
  • 1 puñado de chips de chocolate

Para el crumble:

  • 2 cucharadas de manteca fría o aceite de coco
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 2 cucharadas de harina de almendras

Preparación paso a paso

Paso 1: En un bowl, mezclá los huevos con el azúcar mascabo, el aceite y unas gotas de esencia de vainilla.

Paso 2: Agregá la mitad de la leche, las almendras molidas y el polvo de hornear. Mezclá bien hasta integrar.

Paso 3: Sumá la leche restante, las zanahorias ralladas y la canela.

Paso 4: Incorporá las nueces picadas y los chips de chocolate. Mezclá con movimientos suaves.

Paso 5: Verté la mezcla en moldes individuales previamente aceitados.

Paso 6: Prepará el crumble mezclando la manteca fría (o aceite de coco) con el azúcar y la harina de almendras hasta formar un arenado. Espolvoreá sobre cada mini torta.

Paso 7: Llevá a horno precalentado a 180 °C durante unos 45 minutos, o hasta que estén doradas y firmes.

Tips y variaciones para potenciar la receta

  • Si preferís una versión más húmeda, podés reemplazar parte de la leche por yogur natural.
  • Para una opción más especiada, sumá una pizca de jengibre en polvo o nuez moscada.
  • Servilas tibias con un poco de yogur griego o queso crema natural.
  • Se conservan en la heladera hasta tres días y podés calentarlas unos segundos antes de servir.

Si te gustó esta receta, también podés probar la torta fría de vainillas y chocolate, una opción ideal para quienes buscan postres fáciles y sin complicaciones.

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