Si bien actualmente Jennifer Lawrence no es más la dueña de esta propiedad, te proponemos dar un recorrido por el que fue su hogar desde 2017 en uno de los barrios más exclusivos de Manhattan, el Upper East Side.
Se trata de un departamento construido en dos niveles en la parte más alta del edificio al que se accede a través de un ascensor con llave y vestíbulo privado. Tiene techos altos, vistas de 360 grados sobre Nueva York a través de enormes ventanales, suite principal en una de las esquinas con un gran vestidor, salón con chimenea de piedra caliza y cocina a medida.
Cuenta con casi 400 metros cuadrados de espacio y terrazas en ambos niveles, donde se dispone una cocina exterior, comedor, una mesa de ping pong y un solarium.
En el interior, tres dormitorios y cinco baños con impresionantes ventanales de suelo a techo para permitir las increíbles vistas de la ciudad.
El lujoso edificio cuenta con piscina, gimnasio, sauna, salas de juego, cine, personal en conserjería y portero las veinticuatro horas, así como cámaras de seguridad.
La joya de la corona de este dúplex es la terraza, de dos pisos, descrita por la agencia inmobiliaria como “un parque privado en el cielo”.
