A solo dos semanas de la masacre de Villa Crespo, otra tragedia familiar conmueve a la Argentina. Fernando Dellarciprete, un hombre de 44 años oriundo de Tres Arroyos, asesinó a su esposa Rocío Noemí Villarreal y a sus dos hijos, Tiziano (8) y Francesco (4), antes de suicidarse lanzándose debajo de un camión en la ruta 228, a la altura de Necochea.
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La escena, por su brutalidad, genera escalofríos: el cuerpo de Rocío fue hallado en el asiento trasero del auto familiar, con signos de asfixia. Los niños fueron encontrados sin vida en una zanja, en un claro intento de ocultamiento del crimen. El desenlace, marcado por el impacto del cuerpo del agresor contra el camión, terminó de cerrar un caso que hoy está siendo investigado como femicidio, doble filicidio y suicidio.
Quién era Fernando Dellarciprete
Según lo mostraba en sus redes sociales, Dellarciprete era amante de la velocidad, los deportes extremos y las motos.
Su último posteo en Facebook data del 16 de abril, cuando cambió la foto de portada de su perfil para poner una imagen de su familia hecha al “estilo Ghibli”, con inteligencia artificial.
El resto de las fotos se dividen en dos grandes grupos: por un lado, las familiares. En muchas se ve a los 4: él junto a su esposa y sus dos pequeños. Por otra parte, se observa su pasión por los deportes: era aficionado al ciclismo y también hay fotos que lo muestran surfeando.
Pero su principal pasión, a juzgar por los posteos, tenía que ver con los cuatriciclos. Se multiplican las fotos que lo muestran desafiando los médanos y también en competencias con este vehículo.
Una cronología del horror
La secuencia del crimen comenzó el martes 4 de junio por la noche. Según las pericias, Fernando mató primero a su esposa, posiblemente por asfixia. Luego se dirigió hacia la zona rural de San Mayol y arrojó a sus hijos a una zanja con agua.
Posteriormente, condujo 90 kilómetros hasta llegar a la Ruta 228, donde detuvo el auto y se arrojó al paso de un camión, muriendo en el acto.
“El hombre se arrojó contra el camión y no pude hacer nada. Él se arrojó contra mi vehículo”, le dijo Jonathan Alfredo Luna (36), el conductor del Mercedes-Benz, a Ecos Diarios.
Según se conoció minutos más tarde, a la vera del camino se hallaron los cuerpos dos chicos menores de edad. Luego descubrieron que en Tres Arroyos, en la casa de la familia, el cuerpo de la esposa del hombre que se suicidó: estaba ahorcada con el cable de un velador.
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