Teresa Calandra reveló que estuvo muerta casi un minuto: "Ví una luz y en el fondo un túnel" - Revista Para Ti
 

Teresa Calandra reveló que estuvo muerta casi un minuto: "Ví una luz y en el fondo un túnel"

La empresaria y exmodelo contó que en 1998 tuvo un síncope y estuvo muerta durante casi un minuto. En ese lapso de tiempo ella sintió que entraba en un túnel con una luz brillante y que alguien la recibía tendiéndole la mano. 
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Invitada en PH Podemos hablar, la exmodelo y empresaria Teresa Calandra reveló una experiencia extrema que vivió en 1998, cuando tuvo un síncope y estuvo muerta durante casi un minuto.

Calandra recordó que ella en un principio pensó que se había tratada de un desmayo y que había tenido un lindo sueño. Hablando después con el recordado Víctor Sueiro, la modelo supo que, en realidad, había logrado ver el túnel que el recordado periodista contó en varias oportunidades que algunas personas ven en su tránsito a la muerte.

Teresa contó una reveladora experiencia. Foto captura.

"Yo venía de presentar un festival de Luis Miguel. Había estado en Puerto Madero y había tomado frío. Gonzalo, mi marido, me dijo 'tomate esta pastilla' para evitar el resfrío y me despierto a las seis de la mañana sintiéndome muy mal. Voy despacio al baño. Me miraba en el espejo y vi como cuando a los televisores viejos se les va la señal. En ese momento me arrodillé y, con una voz que era un hilo, dije 'Gonzalo'. Nunca más supe nada", comenzó relatando Teresa.

Y agregó: "Yo sentí que me despegaba toda vestida de blanco y entraba a la gracia de Dios a esa luz. Es difícil de explicar la sensación de felicidad, placer. Es algo de lo que no queres volver. Había una mano que me recibía: era la de mi primer ex marido que en ese momento estaba vivo. Había una luz y en el fondo un túnel".

La empresaria contó que su primer marido la esperaba en el túnel. Foto captura.

Luego la modelo relató que su marido le hizo masajes cardíacos y respiración boca a boca para reanimarla. "Mi marido me hizo respiración boca a boca, masajes cardíacos, me tuvo que abrir la boca porque yo ya estaba con un rictus totalmente dura y entumecida", continuó.

"Me acuerdo que solté esa mano, abrí los ojos al minuto y lo vi que lloraba y estaba desesperado. Le dije 'la próxima vez no me traigas' porque donde yo estuve nunca fui más feliz en mi vida porque tuve la gracia de Dios", completó, muy conmovida.

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