Evangelina Anderson y Martín De Michelis vivieron en Munich hace más de 10 años y, de hecho, allí nació su primer hijo: Bastian De Michelis. Sin embargo, el fútbol los llevó a mudarse a España hasta que, en el 2019, el ex jugador de fútbol fue convocado para ser DT del sub 19 del equipo Bayern de Munich y la pareja decidió volver a la casa donde vivieron en aquellos años.
"Es un lugar que nosotros queremos mucho. Volvimos a la misma casa de Alemania donde vivimos hace doce años, donde nació nuestra familia”, explicó Evangelina en una de sus historias de Instagram y reveló que, precisamente allí, nació Bastián mientras que Lola y Emma son españolas: ambas nacieron en Marbella.
La verdad es que la casa de los De Michelis es increible: súper luminosa y moderna, tiene un amplio living con ventanales que dan a un hermoso jardín. La deco es minimalista, la distribución abierta y cuenta con recursos multifunción. Predomina el blanco -que se combina con tonos neutros, visón y madera natural- porque la idea es que todo se vea simple y funcional.
Evangelina suele decir que gran parte de la vida familiar transcurre en la cocina de la casa ya que ella, y sus hijas, aman cocinar. Precisamente por ello instaló una enorme isla donde amasa pastas caseras y prepara todo tipo recetas vegetarianas (hace muchos años que la modelo no come carne),
En la habitación de Eva predomina el color blanco y lo combinó con detalles en color visón, crudo y almohadones verdes. En su dormitorio tiene una alfombra blanca donde suele sentarse a jugar con sus hijos.
El blanco es el rey de la casa y sólo se suman algunos toques de color para aportarle elegancia y sofisticación pero la clave siempre es que el look sea totalmente sobrio y cero recargado. Esto se repite en cada uno de los ambientes de la casa.
El dormitorio de Evangelina da a un balcón con rejas blancas dond ella suele posar para las fotos y desde el que observa un bosque -muy cercano a su casa- al que suele ir a pasear con sus hijos.
"Muchos me preguntan si tengo mi propio bosque y les cuento que no, que es el bosque de mi barrio y al que vamos todos", explicó una vez en sus historias ante las recurrentes consultas de sus seguidores.
Algo que se destaca en esta hermosa mansión de Munich es la iluminación: muy moderna y original. Si bien ahora cambió los veladores, las lámparas que tenía antes se destacaban por su diseño que mezclaba acero con cuero y le daba un toque súper canchero y moderno al dormitorio.
Lola es, claramente, la intelectual de la familia. No sólo es una excelente alumna -ha ganado varias medallas en las olimpíadas de matemáticas de su escuela- sino que, además, ama leer. "El mejor plan para Lola es ir a una librería y poder elegir lo que quiere comprar. Después la pierdo: se encierra en su cuarto durante horas a leer", contó la modelo en alguna ocasión.
Lola antes dormía con Emma -su hermana menor y también conocida como Abrojito- pero ahora tiene su propio dormitorio, en donde el blanco y el jean se combinan en perfecta armonía.
Velas blancas, almohadones, plantas y muebles de ratán. Este ambiente -es algo asi como un living pequeño e informal- es uno de los lugares favoritos de Evangelina para tomar mate y estudiar alemán.
Luego de llevar a los chicos al colegio y entrenar, ella suele instalarse en esta zona de la casa para tomar clases de alemán -"Lo hablo pero no tan bien como los chicos y Martín", asegura- y también terminar el profesorado de yoga que incluye muchas clases teóricas y cursa por zoom desde el año pasado.
Uno de los rincones favorito de Evangelina por su enorme espejo que se encuentra, precisamente, a metros de la puerta de salida y le permite chequear que su look está perfecto segundos antes de salir a la calle.
Otro espacio que la familia disfruta a pleno porque está cerca de la cocina y es súper cómodo y práctico para la merienda o el desayuno. Los almohadones en rosa viejo le dan calidez al enorme sillón blanco.