Si bien el verano es uno de los momentos ideales para comer más liviano y desintoxicar el cuerpo comiendo sano, muchos caen en la tentación de sumarse a dietas milagrosas que son aparentemente eficaces, pero poco saludables y frustrantes a largo plazo.
El verano invita a hacer dietas y muchas veces nos aferramos a esos planes que prometen bajar varios kilos en pocos días. Pero, cuidado: en general no son dietas saludables ni tampoco tan efectivas como las pintan. Y además se suelen cometer muchos errores que a la larga se lamentan:
La Dra. Norma Isabel Guezikaraian, directora y coordinadora general prácticas profesionales de la carrera Licenciatura en Nutrición de la Fundación Barceló menciona cuatro malos hábitos a la hora de decidir bajar de peso de forma rápida, y recomendaciones para suplantarlos por acciones que den buenos resultados:
Una de las costumbres que más se adopta, es restringir alimentos (sobretodo hidratos de carbono y proteínas). Un plan alimentario como este, genera un desbalance en la proporción de nutrientes y energía que cada persona necesita para sentirse plena. Los hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales que se deben consumir, se relacionan directamente con las necesidades de cada cuerpo y no pueden limitarse de manera arbitraria.
Es por eso, que consultar con una profesional una dieta completa y personalizada es la mejor opción para empezar un plan alimentario en cualquier época del año.
Otro hábito regular para bajar de peso, es saltar comidas. Esto no sólo produce el efecto contrario al deseado, sino que inevitablemente, genera la necesidad de compensación en la siguiente comida.
Si lo que se desea es evitar un atracón en la cena o el almuerzo, se aconseja sumar colaciones entre las cuatro comidas diarias. Esto permitirá mantener una sensación de saciedad durante todo el día y consumir porciones más pequeñas al sentarse a la mesa.
Si bien los jugos frescos son un clásico del verano, y se los ve como una bebida saludable, no es del todo cierto. Las frutas poseen una mayor concentración de azúcar cuando se las exprime. Por eso, es recomendable consumir la fruta entera para aprovechar sus propiedades nutritivas como vitaminas, minerales, fibra y agua. Además, si lo que se busca es generar un efecto de desintoxicación, se puede realizar haciendo un desayuno y almuerzo con frutas.
Por otro lado es común escuchar sobre dietas en las que se elimina la proteína, que se encuentra en las carnes, huevos o lácteos. Fundación Barceló aconseja consumir entre 60 y 80 gramos de proteínas de alto valor biológico diarios (una porción de carne, 2 porciones de queso y claras de huevos). En el caso de los vegetarianos, se recomienda consumir legumbres de todo tipo combinadas con cereales (por ejemplo, soja o lentejas con arroz).
La Dra. Guezikaraian también destaca la importancia de generar hábitos de alimentación saludables y no dietas temporales. Algunos tips sencillos para estar en forma sin descuidar la salud son:
- Mantenerse hidratado con 2 litros de agua diarios, frutas, gelatinas, caldos
- Realizar ejercicio al menos 60 minutos al día (caminar)
- No salir de casa sin desayunar
- Incluir lácteos y frutas en el desayuno
- Incrementar el consumo de frutas y verduras
Asesoró: Dra. Norma Isabel Guezikaraian, directora y coordinadora general prácticas profesionales de la carrera Licenciatura en Nutrición de la Fundación Barceló.
