Día del Coaching: claves para alejar las "excusas mentales" y hacer realidad lo que deseamos - Revista Para Ti
 

Día del Coaching: claves para alejar las "excusas mentales" y hacer realidad lo que deseamos

En el Día del Coaching, que se celebra este 6 de abril, Celina Cocimano (Coach Ontológico y terapeuta emocional), analiza cuáles son las "excusas mentales" que nos solemos poner a la hora de delegar la concreción de proyectos. Y nos brinda claves para destrabar ese nudo y poder avanzar hacia lo que deseamos.
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Muchas veces nos encontramos con un listado interminable de deseos que quedan solo en eso, sueños que no llegamos a cumplir. Esto suele suceder porque creemos que no tenemos las capacidades para llevarlo a cabo, o el tiempo, el dinero, o cualquier traba que logremos vislumbrar.

Cuando nos ponemos en esa postura, el foco de nuestra visión se basa solamente en eso, en buscar “excusas mentales” para justificar por qué los sueños solo quedarán en nuestra cabeza. En definitiva, el trasfondo es la falta de confianza en uno mismo y la poca claridad que tenemos sobre cómo nos haría sentir lo que queremos alcanzar.

Nadie que tenga un propósito claro lo deja en el tintero o en la biblioteca donde ponemos todos nuestros deseos. Por el contrario, esa persona comienza a tomar acción, analiza qué recursos necesita adquirir, qué herramientas incorporar, equilibra sus emociones para acompañar el proceso y su foco está bien puesto en la meta.

Las excusas mentales muchas veces no nos permiten avanzar ni salir de estados de confusión.

Es como ir armando una canoa: el deseo es la canoa, los remos son las herramientas que necesita para poder cruzar la distancia que requiere alcanzar, el mapa es el camino detallado por dónde debe transitar y la forma en qué debe hacerlo, y sus ojos, su propia visión, el punto meta. Es poner fecha de salida del viaje, el tiempo que durará y la fecha de su finalización.

Cómo trabaja el Coaching para ayudar a llegar a la meta

De esta forma trabaja el Coaching, es un acompañamiento de acción ante la premisa “quiero algo pero no sé como hacerlo”, “estoy acá y quiero llegar allá”, “esta situación no me gusta, pero tampoco sé cómo salir de ella o modificarla”.

Todas las trabas (obstáculos) que están en el medio por el cual no podes avanzar, moverte, accionar, tienen respuesta en tu interior, en tu mente, pensamientos, valores, creencias, juicios y percepciones. Ajustando cada uno de esos factores que al comienzo aparecen como obstáculos, es como vas a lograr llegar a tu meta.

Dónde estoy y a dónde quiero llegar, se implementa en empresas, en el deporte, mandos medios, desarrollo personal, individuos, parejas, etc.

El Coaching Ontológico Profesional estimula a las personas a reconectarse consigo mismas, con lo que son y quieren ser. Les brinda el espacio para pensar en eso que les preocupa y no las deja seguir, para ver las cosas (y su realidad) desde otra perspectiva.

Las trabas suelen estar en la mente.

Busca detectar y disolver los obstáculos que impiden a las personas abrirse nuevos caminos. La base de esta disciplina la encontramos en el mundo interpretativo y parte de que, para el observador, la realidad es siempre un constructo personal.

Preguntas para identificar obstáculos que no dejan avanzar

  • ¿Estás seguro/a que no podes hacer realidad tu sueño/deseo?
  • ¿Tu meta no vale tanto la pena como para alcanzarla?
  • ¿Crees que no te lo mereces? ¿Te falta motivación y/o recursos para alcanzarla?
  • ¿Te animás a transformar tus excusas mentales en oportunidades de apertura?
  • ¿Estás listo/a para darte cuenta que podes lograrlo?
  • ¿Qué ganarías  y cómo te sentirías si lo lograrías?

La importancia del lenguaje que abre posibilidades

El lenguaje abre o cierra posibilidades.

Es de gran importancia identificar y tomar consciencia sobre cómo utilizamos el lenguaje, ya que abre o cierra nuestras posibilidades.

Palabras como: Es posible, Quiero, Éxito, Decido, Oportunidad, Capaz, Gracias, Felicidades, forman parte del lenguaje que abre posibilidades.

Como también las frases: Yo valgo, Soy capaz, Puedo lograrlo, Yo puedo, Lo voy a hacer, Me siento bien.

También preguntarnos: ¿Qué necesito aprender? ¿Cómo puedo ayudar? ¿Cuándo lo puedo hacer? ¿Qué necesito? ¿Qué podría hacer?  ¿Cómo lo puedo conseguir?

Por el contrario, también tenemos el lenguaje que cierra posibilidades,

Palabras como: Nunca, Inútil, Fracaso, Tengo, Debo, Incapaz, Imposible, cierran posibilidades.

Como así también las frases: No tengo tiempo, Tengo miedo, Lo intentare, No sirvo para esto, Detesto esto, Siempre lo he hecho así.

También preguntarnos: ¿Por qué? ¿Más de lo que ya sé? ¿Tengo que cambiar? ¿Lo tengo que hacer ahora? ¿Qué gano con esto?

Podemos identificar si en tu lenguaje externo como interno identificás estas palabras, frases o preguntas. Conociendo ahora las que abren posibilidades, asegurarse de elegirlas con consciencia y teniendo en claro lo que se quiere alcanzar, para que los pensamientos, acciones y emociones estén alineadas buscando el mismo objetivo.

Siempre podés moverte del lugar donde estás, tus únicas raíces limitantes están en tu mente.

Celina Cocimano es Coach Ontológico y Terapeuta Emocional, @celinacocimano

Más información en parati.com.ar

   

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