Los muebles de fibras naturales no pasan de moda. Y sobre todo en estos tiempos en los que pasar mucho tiempo en el hogar se volvió un hábito y el estar en contacto con la naturaleza -de forma u otra- se convirtió en una especie de necesidad.
De mimbre, ratán, yute, sisal o bambú le aportan un plus de calidez y frescura a cualquier ambiente y nos acercan a la naturaleza en su estado más puro.
Actualmente, existe una amplia variedad de diseños de muebles de fibras naturales, y eso es lo que los convierte en una opción muy versátil, conviviendo a la perfección en ambientes con cualquier estilo decorativo, desde el más clásico hasta el más vanguardista.
Si bien antes era muy común verlos en espacios exteriores, en poco tiempo se fueron ganaron su lugar en los interiores y hoy, los conquistan y son tendencia.
- Tip si lo vas a ubicar en exteriores: es importante que estén cubiertos para que no reciban directamente la luz del sol ni el agua, ya que están hechos de un material que absorbe la humedad y pueden arruinarse.
Si bien la mayoría son muebles de fibras en tonos claros, existen otros con tintes más oscuros, lo que permite jugar con las diferentes tonalidades y lograr un efecto más elegante y sobrio en el ambiente.
Este tipo de muebles quedan perfectos en cualquier rincón del hogar. Y no es necesario que todos ellos hagan juego, a veces con sólo un detalle de fibras es suficiente para darle al ambiente su dosis de calidez y naturalidad.
Un puff, una silla, un rack TV, o una biblioteca. Las posibilidades son muy variadas. Pero siempre se puede empezar por pequeños detalles para decorar la casa con fibras naturales.
El valor de lo artesanal
La mayoría de estos muebles están realizados a mano, entretejiendo o entrelazando las diferentes fibras naturales. Es por eso que reivindica el valor de lo artesanal.