Si hay que hablar de uno de los máximos ídolos que tuvo la historia de Boca, sin dudas que uno de los primeros nombres que aparecen en la lista es el de Roberto Pato Abbondanzieri. El ex jugador logró levantar catorce veces la copa, se convirtió en una de las figuras más queridas y hoy tiene una vida totalmente distinta a la que se le conocía.
El año del quiebre fue el 2019, momento en el que murió su papá y tomó la decisión de abandonar la posición de ayudante técnico de Martín Palermo. “Dejé el fútbol porque quería disfrutar a mis viejos pero no lo pude hacer porque Martín me llamó para que lo acompañe en la aventura como director técnico”, afirmó en una entrevista que se publicó hace horas y en donde se revela su impensado presente.
Y así fue como el ex arquero de 49 años comenzó a meterse de a poco en el ámbito rural y hoy vive en Bouquet, un pueblo de 1.500 habitantes ubicado a casi 200 kilómetros de la capital de Santa Fe, de donde es oriundo. Es también una forma de continuar con el legado familiar debido a que su papá se dedicó al sector agropecuario desde que era joven.
“Me crié arriba de las máquinas, en las cosechadoras. Siempre fue la ilusión mía tener una”, dijo el Pato orgulloso de que recientemente cumplió su meta. “Mi papá estaría todo el día acá conmigo”, recordó en diálogo con Esteban Fuentes para Clarín.
Si bien afirmó que le “falta mucho por aprender”, lo cierto es que avanza a pasos agigantados y ya se convirtió en contratista y hace poco adquirió una cosechadora para trabajar en su campo y en el de terceros. “Siempre que tenía tiempo libre, me subía a la cosechadora de mi cuñado y la manejaba. Yo quería tener algo propio y quería hacer lo que me gusta: manejar una”, confesó.
Las dificultades de la vida en el campo
“Cuesta mucho sembrar, cosechar, tal como está el valor del combustible. Uno que nunca había estado en esto se fija lo que cuesta invertir en el campo”, relató en base a su experiencia.
Y agregó: “Toda la gente dice 'eh que compran camionetas, cosechadoras', pero hay mucho riesgo de comprar y que la pases mal o que no venga la cosecha. Hoy en día el valor que tienen los granos son muy buenos, los rindes también son buenos pero se invierte mucho. sobre todo los que alquilan”.
