Durante la temporada más fría del año, patios y jardines pueden igual llenarse de color con algunas especies bellísimas que desafían el termómetro con unas flores preciosas y a todo color.
1. El rojo profundo de la Poinsettia
La Poinsettia (Flor de Navidad o Flor de Pascua según la región) es originaria de México. No tiene flores sino unas vistosas brácteas (como se las llama en botánica) de diferentes colores: el clásico rojo, salmón, amarillo, blanco. aquí las flores son las que aparecen en el centro de la bráctea, pequeñitas y de color amarillo, sin valor decorativo.
- Ubicación: en interiores lejos de corrientes de calor o de aire. En exteriores soporta frío y heladas débiles (hasta -2ºC).
- Luz: debe situarse siempre en un lugar iluminado pero sin sol directo.
- Riego: Conviene regar a fondo y esperar a que la tierra esté moderadamente seca antes de regar otra vez. Después de la floración hay que dejarla descansar durante varias semanas regándola con menos frecuencia. También aconsejan pulverizar las hojas con agua templada durante la época de floración, pero sin mojar las brácteas rojas.
2. Camelia, la dama de las flores
La Camelia Japónica (por supuesto, de origen oriental) es un arbusto de crecimiento lento con floración otoñal, invernal o primaveral. Sus flores pueden ser de color blanco al rosa, rojo, púrpura, salmón, amarillo o blanco, y además de tener un tamaño generoso, pueden ser simples, dobles o semidobles, según la cantidad de pétalos.
- Ubicación: es muy sensible a las calefacciones, por lo que es recomendable ubicarla en los lugares más frescos de la casa o directamente en exteriores, ya que resiste sin problema los fríos de estas latitudes. Sólo necesita que protejas la tierra con paja o cortezas.
- Luz: mucha luz pero sin sol directo.
- Riego. Durante el verano, riego constante. Durante el invierno, el riego será más moderado. Es importante que durante los tres meses de floración reciba muy poca cantidad de agua, para que sus pedúnculos se formen fuertes y soporten el peso del capullo de la flor.
3. Bignonia de Invierno
La Pyrostegia Venusta o Bignogia de Invierno (algunos también la conocen como Flor de San Juan) pertenece a una fmailia con algo más de 15 especies de plantas trepadoras, originarias de Brasil y el cono sur. Son arbustos trepadores de crecimiento rápido que pueden llegar a los 20 metros de altura si el clima lo permite. Sus vistosísimas flores naranjas tienen forma tubular con los pétalos vueltos hacia detrás y aparecen desde otoño hasta inicios de la primavera.
- Ubicación: crecen bien en exteriores, donde se utilizan para cubrir muros y pérgolas, o en macetas grandes.
- Luz: necesita un lugar soleado o de semisombra; es capaz de prosperar a la sombra pero producirá bastantes menos flores.
- Riego: debe ser regular pero con cantidades moderadas de agua; tiene necesidades medias de agua.
4. Hortensias de invierno
Son apenas diferentes que las que estamos acostumbrados a ver. La primera diferencia es su tamaño: flores más pequeñas y hojas más grandes. Conocida como hortensia de invierno o col de invierno, la Bergenia crassifolia es una planta z originaria de los bosques de Siberia, ideal para jardines y con pocos caprichos de cultivo.
Se trata de una herbácea perenne que puede crecer hasta alcanzar entre 15 y 45 centímetros de altura, formando matas redondeadas.
- Ubicación: como su nombre lo indica, la Hortensia de Invierno no tiene ningún probelma con el frío. Soportan muy bien las bajas temperaturas.
- Luz: prefieren la semisombra o los lugares con sol siempre que el sueño esté muy húmedo.
- Riego: necesitan que los riegos sean frecuentes, porque no soportan la falta de agua. Hay que procurar que el suelo siempre esté húmedo y sean ricos en materia orgánica.
5. Salvia Involucrata, otra especie de frío
También conocida como Coral de invierno, es una de las plantas que más disfruta del otoño. De tonos generalmente azulados, violáceos y fucsias, las hay también rojas y blancas; algunas más sensibles al frío, otras que toleran la sombra y muchas que prefieren el pleno sol.Regala unas flores rosadas muy vistozas desde el otoño y durante todo el invierno.
- Ubicación: en general soporta el frío pero no las heladas. En ese caso, conviene repararlas.
- Luz: prefiere media sombra y suelos fértiles.
- Riego: poco o medio durante los meses fríos.
6. Streptosolen Jamesonii o Arbusto de Fuego
El género Streptosolen, de la familia de las Solanaceae, está formado por 2 especies de arbustos originarios de Colombia, Ecuador y Perú. Se trata de un arbusto que puede alcanzar hasta los 3 m de altura que florece en invierno y primavera en jardines protegidos de las heladas. Las flores cambian de color con la edad, del amarillo al anaranjado.
- Ubicación: se las suele usar en exteriores para cubrir muros bajos o como trepadora. También puede cultivarse en macetas como plantas de interior. Como se trata de una planta tropical, en general no resiste el frío por debajo de los 7 grados.
- Luz: prospera a media sombra o a pleno sol si el verano no es muy caluroso.
- Riego: regar de forma abundante durante la primavera y el verano pero sin encharcar e ir reduciendo los riegos en otoño e invierno.
7. Lantana, un arbusto multicolor
La Lantana es un arbusto muy colorido. Este arbusto perenne originario de Sudamérica y Sudáfrica, tiene unas inflorescencias con unas flores diminutas que se abren en su sucesión de los bordes al centro. Florece hace desde mediados de primavera a finales del otoño, con una amplia variedad de colores.
- Ubicación: cultivá la Lantana en un interior luminoso en invierno y en verano, colócala afuera, en un lugar soleado y protegido. En ambos casos, a pleno sol.
- Temperatura: en exteriores, soporta hasta 10 ºC. En interiores, lejos de las fuentes de calor.
- Riego: debe ser regular, con el agregado de algún fertilizante cuando empieza a florecer..