Coloridos, fáciles de cuidar, resistentes, antimosquitos y con un aroma muy especial, los geranios se consagran como una de las plantas con flor perfectas para decorar y llenar de vida los diferentes espacios exteriores -y por qué no interiores- ¡en cualquier época del año!.
En el marco de una nueva Semana Deco Para Ti, te contamos todo lo que tenés que saber sobre esta especie alegre y colorida que causa furor conquistando patios, jardines, balcones y terrazas.
Originarios de Sudáfrica y también conocidos por su nombre científico como pelargonium, cuentan con más de 240 variedades diferentes y se destacan por tener la capacidad de florecer todo el año (en climas templados).
Los geranios y su particular floración
Un dato curioso es que esta especie puede llegar a vivir 40 años -o más- si se la cuida correctamente. En lo que respecta a su floración, necesitan de muchas horas de luz solar para poder lucirse con todo su encanto y conquistar los diferentes espacios exteriores. Si se cultivan en macetas, se recomienda que sean de unos 30-40 centímetros de diámetro para que puedan desarrollarse cómodamente.
Cuidados básicos de los geranios
El espacio ideal para colocar esta bellísima especie, es todo aquel que cuente con una buena dosis de iluminación natural, incluso los expertos suelen recomendar que reciba varias horas de luz solar directa durante el día para mejorar su floración. ¡Pero ojo!, es fundamental evitar que los rayos directos del sol impacten sobre sos hojas en las horas más calurosas.
La temperatura ideal para este tipo de plantas oscila entre los 18 ºC y 20 ºC. Las heladas no son su fuerte por lo que se recomienda evitarlas ya que podrían no resistirlas.
El sustrato es otro punto fundamental que va a influir directamente en su capacidad de floración. Para eso, se recomienda usar uno que asegure un buen drenaje, ya que hay que evitar todo tipo de encharcamientos y exceso de humedad.
Sus riegos también son muy importantes y deben ser moderados. Lo más importante es no abusar del uso del agua ya que podría causar la pudrición de sus raíces. Se recomienda hacerlo solamente cuando se haya comprobado que el sustrato esté ligeramente húmedo.
En su época de crecimiento, el fertilizante líquido será un gran aliado para contribuir a su correcto crecimiento y abundante floración. Lo ideal es comenzar a aplicarlo al principio de la primavera, aunque también puede hacerse a lo largo del verano y con una frecuencia de una vez al mes. Los abonos orgánicos como compust, humus, etc., también son una muy buena opción para los geranios.
La poda de los geranios se hacer en otoño, aunque en verano se recomienda retirar algunas hojas secas y flores marchitas para para ayudar a la próxima floración.
