La pasada semana, los Reyes de España acudieron al homenaje en honor duque de Edimburgo en la abadía de Westminster, en Londres, junto a miembros de otras casas reales europeas; y siete días después, Letizia Ortiz regresó al país en solitario para presidir un acto junto a el príncipe Carlos.
La monarca fue recibida por el hijo de Isabel II a las puertas del castillo de Auckland, ubicado en el condado de Durham, lugar en el que ambos pudieron visitar la colección Zurbarán. Las doce tribus de Israel: Jacob y sus hijos, la primera.
Las doce tribus de Israel: Jacob y sus hijos', una colección que el obispo Richard Trevor adquirió en el siglo XVIII. Estaba formada originalmente por trece pinturas, aunque Trevor solo logró hacerse con doce, faltándole el retrato de Benjamín, que se vendió de forma individual al duque de Lancaster. Sin embargo, el obispo Trevor decidió pedirle al pintor Arthur Pond una copia del retrato de Benjamín para completar el lote.
El encuentro protagonizado entre ambos volvió a demostrar la buena sintonía que existe entre las casas reales.
El look de Letizia en color rojo, su tono favorito
Para la ocasión, la Reina optó por uno de sus colores fetiche, el rojo, y estrenó un espectacular vestido entallado de manga larga, cuello redondo y delicados botones en negro a contrastono en el hombro de Carolina Herrera. Un diseño muy favorecedor al que ha añadido complementos a juego: cartera de mano acolchada que también firmaba la diseñadora venezolana y stilettos de Magrit, un modelo que estrenó hace apenas unos días.
En cuanto a joyas, la monarca eligió unos aros lde Chanel de oro blanco y diamante en forma de pluma, que llevan en su joyero desde 2015 y por los que manifestó su amor en múltiples ocasiones.
